Issei el soberano inmortal.

4.

Al día siguiente era sábado y Issei habia llamado a Elisa para que se pudieran ver temprano.

Issei: Ten.

Dándole un pequeño frasco con algunas píldoras.

Issei: Son 10 en total dale una cada día y se sentirá mejor.

Elisa: Esta bien.
Entonces ella va a despertar cuando se terminen todas.

Issei: No.
Ella despertara a la primera pero estará un poco débil así que debes tener agua lista y un poco de comida pero que no sea muy pesada ya que debes de saber que estuvo muy débil.

Elisa: Entiendo.

Issei: Una cosa más.

Elisa: Si.

Issei: No le digas a nadie quien te las dio no quiero problemas por ahora.

Elisa: Esta bien pero puedo decirle a mi madre enquesea.

Issei: Bien pero solo ella pero nadie más.

Elisa: Esta bien.
Entonces iré ahora mismo para verla.

Issei por su parte solo asintió.
Elisa antes de irse se acerco a Issei y le dio un abrazo al terminar se fue del lugar rumbo al inframundo ya que tenia algo de prisa.

Al llegar fue casi corriendo por la casa directo al cuarto de su madre.

Mayordomo: Elisa-sama es una sorpresa que allá venido sin previo aviso.

Elisa: Quería ver a mi madre.

Mayordomo: Entiendo adelante.

Elisa solo asintió pero antes de ir al cuarto fue a la cocina y trajo una jarra de agua y un poco de sopa no muy pesado.

Al llegar al cuarto le puso seguro para que nadie la molestara.
Y saco el frasco con las píldoras y le dio una.

Elisa: Espero funcione.

Pasaron los minutos y Elisa noto como su madre movía un poco la mano.

Elisa: Mama.

Ella poco a poco se movía hasta que logro abrir sus ojos y lo primero que vio fue a su hija con algunas lágrimas pero con una sonrisa.

Misla: Elisa as crecido mucho.

Elisa no soporto más y le dio un gran abrazo a su madre pero sin tanta fuerza para no lastimarla.