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—Entiendo, debes extrañar salir, estar con tu padre y tu abuelo, tu vida —Me dice Colson y yo asentí, tiene una parte de razón

—Supongo... Aunque si te soy sincera, mi vida era una mierda, no tenía otra ocupación, mi vida se basaba en irme de fiesta, drogas y alcohol... En vez de hacer algo que en verdad sirva —Dije mientras pasaba mis manos por mi rostro, bajamos las escaleras y nos dirigimos a una de las bancas del patio, la luz es muy tenue y no había casi nadie afuera ya

—¿Y qué piensas hacer ahora? —Me pregunta y yo solo suelto un suspiro

—Supongo que volver a mi casa, será hora de aprender sobre el negocio de mi familia... Comenzar otra etapa —Dije mientras lo miraba a los ojos —Pero aún no tengo seguro nada... Ni siquiera sé si estoy lista para salir —Dije con una poco cabizbaja

—¿A qué le tienes miedo? ¿Qué es eso que te aterra que no te deja pensar más allá? —Me pregunta y yo solo me encogí de hombros, creo que ni siquiera yo tengo esa respuesta —Eres fuerte, eres increíble... No tengas miedo —Me dice con suavidad, sin más, me acerco a él y lo abrazo, Colson había sido el más grande apoyo aquí, él podía entenderme en el peor momento por el que pasó

—Quiero que después de salir, sigas siendo mi amigo —Dije mientras dejaba que me consolará, recargo su barbilla sobre mi cabeza mientras frotaba mis brazos para que el frío desapareciera

—Eso no lo dudes...









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—¿Y cómo te sientes hoy? ¿Emocionada? ¿Nostálgica? Dime qué es lo que está pasando por tu cabeza —Me pregunta la psiquiatra, yo solo tamborileaba mis dedos sobre el sofá y trato de ordenar todo lo que tengo en la cabeza

—Pues... Supongo que feliz, me gusta volver a ver a papá y al abuelo, ayer ayude a Gloria con las galletas de mantequilla y me dejó guardar unas para ellos —Dije con una sonrisa

—¿Guardaste galletas para ambos? —Me pregunta y yo asentí con la cabeza —¿Y para Christopher? ¿Guardaste galletas para él? —Me pregunta curiosa y yo negué con la cabeza —¿Por qué? —Preguntó

—Supongo que ya no espero que venga... No soy su prioridad, no mostró interés en mi... Yo tampoco debería mostrar interés en él —Dije muy segura de mi, aunque sabía que por dentro quería romperme en pedazos y llorar, pero no lo haría, hoy no

—¿Por qué no me hablas un poco de tus sentimientos actuales hacia él?...



































La camioneta se detiene justo al frente del centro de rehabilitación, un Christopher emocionado baja del auto, al igual, un Zabdiel con un enorme ramo de flores y una enorme caja de chocolates
Eran las 9 am en punto, Christopher no estaba dispuesto a pasarse por un minuto
Se pasan a la entrada, justo ahí, había un chico con audífonos, esperando a las personas

—Buen día —Dice Christopher frente a él, el chico detiene su música y alza su mirada hacia él —Vengo a ver a una paciente, su nombre es _______ Galeoto Farrell —Dijo Christopher, el chico asíntio mientras buscaba el cuaderno de registro de la entrada

—¿Me proporciona su nombre? —Le indica el chico tras la recepción

—Christopher Vélez —Respondió. El chico al escuchar el nombre de Christopher, rápidamente buscó una carpeta que había sobre el escritorio, rápidamente comenzó a buscar dentro, hasta encontrar la lista de personas que no pueden entrar al centro, ubicó el nombre y fotografía que coincidían con él y volvió a guardar los documentos

—Lo siento, pero por el momento no puede pasar —Dice el chico, Christopher frunce el ceño al instante y lo mira molesto

—¿Por qué no? —Le pregunta molesto —Estoy en día y hora indicada, tengo derecho a pasar —Dice Christopher molesto, pero el chico niega

—Tengo órdenes de no dejarlo pasar, lo siento, pero usted no puede accesar al centro —Dice el tipo, Christopher niega con la cabeza, mientras la desesperación comienza a jugar con él

—¿Quién lo prohibió? Ya pasaron los putos 6 meses, no deberían prohibirme la entrada, habla con alguien para que me dejen pasar —Dijo enojado, pero el chico niega

—Dile a la psiquiatra que ya ha pasado el tiempo que pedían, debe haber una confusión —Dice Zabdiel tras los chicos, le entrega las flores y los chocolate a cuidar a Patrick y se acerca con Christopher

—Es una orden que no tiene especificaciones, yo solo... —Antes de que termine de decir algo, Christopher saca un arma y le apunta directamente a la cara, asustando completamente al chico

—Abre la puta puerta o voy a entrar a la fuerza.

Estoy Aquí Por Ti||C.V.&TÚ||TERMINADAWhere stories live. Discover now