Cap 22

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[Tu]

Tal vez parezca una niña pequeña haciendo este tipo de cosas pero me da miedo enamorarme de una persona que acabo de conocer y que me lastime igual o peor que lo hizo Joel, no sé que hacer y sé que fui muy grosera e inmadura con Zabdiel allá afuera pero es mi corazón y mi cuerpo los que sufrirían.

Terminé de acomodar mi ropa y salí con el vestido en la mano para ir a pagarlo, busqué con la mirada a Zabdiel y vi que estaba a fuera del almacén hablando con alguien por teléfono, no le tomé mucha atención y me dirigí a la caja para pagar.

—Hola, quiero llevar este vestido—le pasé el vestido a la chica que estaba atendiendo

—Si claro—sonrió amablemente, moví mi pie un poco inquieta, cada vez que siento que hice algo malo lo muevo—¿tu eres algo de Zabdiel de Jesús?—la miré un poco confundida

—¿Lo conoces?—ella me miró como si fuese algo obvio

—Todo el mundo lo conoce, es un gran empresario y además de eso es guapísimo, cualquier chica daría lo que fuese por estar con él—suspiró como enamorada—fue muy afortunada la novia de él, vi en las noticias que habían terminado—asentí

—Respondiendo tu pregunta anterior él y yo somos amigos, nada más—sonreí forzadamente

—Eso no parecía pero eso es su asunto, aunque sé que su socio Christopher Vélez también es guapísimo—hice una pequeña mueca al escucharla decir eso, se siente raro que otras chicas me digan que Chris es guapo, lo es pero aun así es raro

—Si, Christopher es lindo pero es un tarado—reí y ella me miró confundida—lo siento, es que él es mi mejor amigo—me miró sorprendida

—Que afortunada eres de estar rodeadas de esos hombres—me pasó la bolsa con el vestido

—Supongo—dije nada más—muchas gracias—sonreí y salí de la tienda

—¿Quieres irte ya?—asentí y empecé a caminar, él venía detrás de mi, ¿por qué seré tan tonta e inmadura?

Tiempo después...

Envié el último archivo y organicé todo para por fin poder irme a mi casa, hace un tiempo compré un apartamento después de que aumentaron mi suelo y me fui a vivir allá mientras Chris no estaba, él insistió mucho que me quedara viviendo con él para que le hiciera compañía y pues la verdad me gusta mucho estar con él, después de todo es como un hermano pero necesitaba mi propio espacio y él también.

Fue muy duro hablar con mis papás sobre lo que pasó con Joel y pensé que iban a odiarme por todo pero fue todo lo contrario, me entendieron y me apoyaron. En cuanto a Joel no lo he vuelto a ver y eso es lo mejor que me ha podido pasar, Valentina y Erick empezaron a salir hace poco, ella se llevó una gran decepción al darse cuenta que a Jeremy no le gustaban las chicas y después de eso se volvieron muy buenos amigos. Mike y yo nos hemos unido muchísimo más, él empezó a salir con una compañera del trabajo y eso es muy bueno porque él se merece una buena chica. La puerta de mi oficina fue tocada

—Pase—empecé a guardar mis cosas, la puerta fue abierta dejándome ver a Catalina

—Hola ______, me dijeron que tu novio te está esperando allá abajo—la miré sorprendida y emocionada a la vez

—¿De verdad?—asintió—él me había dicho que llegaba mañana pero muchas gracias enseguida bajo—sonreí ,ella rio bajito y salió de mi oficina, me apresuré a guardar mis cosas, verifiqué que todo estuviese en orden y me salí casi corriendo de la oficina, me dirigí a los ascensores, oprimí el botón para que llegara al piso donde estaba. Justo ahora se va a demorar este aparato.

Empecé a mover mi pie algo impaciente, ¿por qué serán tan lentas estas cosas cuando uno las necesita con urgencia?

—Calma, te puedes fracturar el pie—bromeó una voz masculina, volteé a ver y estaba Mike

—Lo siento—reí—es que odio que se demore esta cosa cuando más lo necesito—hubo un pequeño sonido dándome a entender que ya había llegado el ascensor, las puertas se abrieron y de este salieron varias personas

—Después de ti—entré primero al ascensor y a los pocos segundos entró él—¿cómo va todo?—oprimí el botón que nos llevaría al primer piso

—Todo muy bien y ¿tu como vas? te habías perdido—reímos

—Si, es que don Luis me ha tenido muy ocupado ya ves que no ser tu asistente me ocupa más de lo que creía—reímos nuevamente

—Eres muy exagerado y sabes que nunca te consideré mi asistente,eras más mi compañero—las puertas del ascensor se abrieron en el piso al que anhelaba tanto llegar

—Cuídate mucho y bájale dos rayitas o más si puedes—dijo burlón y reí, me apresuré a salir y cuando salí del edificio lo vi recargado en su auto esperándome

—¿No que llegabas mañana?—me tiré a sus brazos y él me apegó más a su cuerpo—a veces eres tan mentiroso Zabdiel de Jesús—rodeé su nuca y rió

—Así me quieres—reí—te extrañé mucho—me besó, de inmediato correspondí el beso había esperado mucho tiempo para volver a sentir sus labios, él posicionó sus manos en mi cintura y me apegó más él, nos besábamos con mucha necesidad y amor, la falta de aire se estaba haciendo presente

—Yo te extrañé mucho más—juntó nuestras frentes

—Ya quería tenerte nuevamente en mis brazos,en mi cama—reímos—besarte todos los días y hacerte el amor- susurró en mi oído, mis mejillas se tornaron rojas y le di un pequeño golpe a lo cual él se quejó pero sabía que no le dolía

—Tú solo piensas en eso, pero me alegra ser con quien pases haciéndolo—dejé un corto beso en sus labios

—Amo cuando me dices esas cosas—iba a hablar pero fui interrumpida por un golpe en la ventana del auto de Zabdiel que provenía del interior—ah mi amor, una sorpresa para ti—miré hacia el interior de la ventana sin dejar de abrazar a Zabdiel y esta fue bajada dejándome ver a mi mejor amigo

—Dejen ese tipo de demostraciones en la calle y por cierto yo estoy muy bien _______ gracias por preguntar—dijo sarcástico, Zabdiel y yo reímos

—Que bueno verte Bryant, ya te extrañaba—sonreí

—A mi no es a quien extrañabas, sino a tu novio que por cierto Zabdiel cuando vayas esta vez a mi casa trata de no hacer gritar tanto a mi mejor amiga—se burló, lo miré avergonzada y estaba segura de que mis mejillas se pusieron más rojas de lo que estaban y puedo decir que ahora si parecía un tomate

—¿Si ves por qué te digo que vivas conmigo y no con él chismoso de tu mejor amigo?—dejó un beso en mi mejilla

—Ah no, eso si no, prefiero ponerme tapones cuando vayas a visitarla antes de que te la lleves a tu casa—dijo celoso y reí apenada, siento mucha vergüenza con Chris—Alessandra no tengas pena conmigo, yo sé exactamente como es el acto—sonrió burlón

—¿Tú que hablas del ruido? si muchas veces cuando estaba con _______ durmiendo y tu llevabas a una chica se podía escuchar hasta la casa de enfrente, eso parecía que la estuvieses matando—rio

—De placer la estaba matando—dijo pícaro y chocó su mano con la de Zabdiel

—¿Se les olvida que estoy aquí? puedo escuchar lo que dicen y no me interesa si la matas de placer o no—rodé mis ojos

—Lo siento amor, aunque tu sabes que yo a ti si—levanté una ceja—no digo más nada, más bien ¿quieres ir a comer?—asentí y me separé del abrazo con Zabdiel

—Yo también quiero—dijo como niño pequeño y reí, Arturo salió del auto para abrir la puerta del auto, yo subí primero y le di un abrazo a Chris—te extrañé—dejó un beso en mi mejilla y nos separamos del abrazo

—Yo también te extrañé—sonreí, a los pocos segundos subió Zabdiel

—No me robes a mi novia Vélez—me abrazó por los hombros

—Yo fui primero que tu y amigo mata novio—sonrió victorioso, sólo reí al verlos así

AMANTES DE UNA NOCHE |ZABDIEL DE JESÚS Y TÚ|Where stories live. Discover now