4.- El rey y la princesa

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Al estar frente a el. Elizabeth hizo su reverencia correspondiente.

Meliodas inclinó un poco la cabeza y luego estiró la mano

Ella estrecho la suya con la de el y éste le depositó un tierno beso sobre la comisura de la mano

-Bienvenida a Irlanda espero sea de su agrado.-

Comento con una ligera sonrisa.

-Todo es hermoso, disculpe la impertinencia mía, pero quise venir en persona a disculparme por las locuras de mi hermano mayor.-

Comento con su tono de voz suave

-No se preocupe, soy demasiado comprensivo, pero por eso mismo quise hablar en persona con su padre. Pero por el momento deben estar hambrientos, ah Sido un largo viaje ¿Me acompañan al comedor? He preparado un banquete para ustedes.-

Zeldris camino rápido hacia el comedor mientras Meliodas hablaba con Elizabeth.

Vio a Gelda quien ya terminaba los detalles de la mesa

-Coloca una vajilla más. El rey vino con su hija.-

Gelda se movió lo más rápido que pudo

En cuanto Meliodas llegó al comedor con Baltra y Elizabeth todo estaba completo ya.

Gelda se puso de pie junto a Zeldris

-Ella es Gelda, esposa de mi hermano Zeldris. Gelda te presento al rey Baltra y a la princesa Elizabeth.-

Gelda reverencio ante ellos y del mismo modo devolvieron el saludo.

Para después cada uno tomar un asiento en aquella gran mesa, disponiendose a comer en paz

Durante la comida solo se mencionaban algunas palabras acerca de los alimentos y algunas costumbres parecidas que tenían en Britannia. Ya que no era de buen gusto platicar mucho durante una comida.

Al término de esta todos caminaron junto al rey Meliodas por el palacio mostrando los alrededores incluyendo las recamaras que tenían preparadas para ellos.

Seguidamente se despidió de Elizabeth ya que el debía hablar con su padre a solas.

Elizabeth se quedó al cuidado y compañía de Gelda, quien la llevó al jardín trasero donde se encontraban los rosales del palacio y un gran kiosco en medio como adorno.

Ella estaba cautivada.

Gelda era una exelente compañía, ambas platicaban amenamente, pues tenían bastantes cosas en común.

Cerca del atardecer Zeldris le recordó a Gelda el compromiso que tenían de ir al pueblo para dar inicio al festival de la cosecha.

Elizabeth no pudo evitar no escuchar eso.

-¿Festival de la cosecha?-

Preguntó un poco apenada.

-Es tradición en Irlanda de agradecer por las buenas cosechas y por iniciar unas nuevas. Su majestades y yo debemos asistir. Pero usted y el rey pueden quedarse a descansar no se preocupe alteza.-

Explicó brevemente Gelda.

Elizabeth se mostro entusiasmada por ir y quiso preguntar al mismo rey si podía asistir.

Era la primera vez que escuchaba acerca de eso. En Britannia no solían hacer festivales.

Gelda le comento que la acompañaría hasta con Meliodas para preguntarle si era posible el que ella vaya.

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