Después de lo que pasó en el baño siempre traté de evitarlo a él, no quería verlo, no me interesaba verlo.
Bueno eso creía yo en ese momento.
Sentí algo diferente, algo como sentir más allá que simplemente sexo como siempre hacía.
Ya llegando la última hora, la hora de poder irnos a casa.
Había parqueado mi carro en el estacionamiento del colegio era un carro básico blanco nada extravagante. Así que me despedí de las chicas que conocí con un beso en la mejilla y me dirigí hacia mi carro, tratando de entrar a mi carro me di cuenta de que no podía porque había un porche negro muy mal parqueado al lado de mi carro y del otro lado una gran camioneta, que me impedían poder salir y entrar en el carro.
Opte por esperar un rato a algunos de los dueños de los vehículos que estaban impidiendo irme hacia mi casa y descansar tranquilamente.
Así que me acomode en la parte trasera de mi coche, vi a alguien entrar a al porche así que me dirigí hacia él y toque la ventana.
Antes de que la abriera completamente comencé hablar muy rápido y molesta.
- Mira realmente no sé quién eres, pero eres un estúpido, no sé que clase de persona eres, si se te puede decir así ni siquiera saber parquear tu coche, ¿no se supone que para tener licencia debes saber manejar y parquearte? pedazo de idi...- me calle al momento de ver de quien era el coche era de él, el chico que me hizo llegar al cielo hoy en el baño. - Idiota - dije esto para terminar la frase, pero sinceramente estaba muy nerviosa de volver a verlo.
- Primero que nada, hola samanta- dice esto con una sonrisa seductora.
¿Cómo es posible que supo mi nombre tan rápido? ¿Le interesaba tanto como para que tomara su tiempo de investigarme?
Comenzaron a llegarme preguntas a mi cabeza en este momento, pero decidí mejor ignorarlas.
- ¿Te puedes largar ya?, porque realmente me quiero ir - dije sin importancia.
-¡Uy! que carácter, me gustan las chicas así. Aunque eres un poco diferente por lo que he observado en el día- dice esto mirándome de forma coqueta.
- Wao, realmente eres un idiota, no tendremos más sexo para tu información fue solo una vez.- dije esto para sonar lo más fría posible y para que se dé cuenta de que sé que es un patán mujeriego.
- Ni siquiera me conoces, por cierto soy Deimon Harnees, muñeca, Pero ya debes de saberlo todos me conocen.
Realmente si lo sabía, me lo habían comentado en todo el día las chicas asombradas por su belleza y todo el dinero que tenía.
- Mira no lo sabía, ni me interesa.- dije mirándolo con un poco descaradamente. Era demasiado creído para mi parecer. Miro la hora en mi celular desesperada pues después de ir a mi casa y bañarme necesitaba ir a un curso de baile y estaba tarde. - Oye, realmente estoy llegando tarde para algo, ¿puedes moverte ya?- lo dije con tono de angustia.
- ¿A donde irás? yo te llevaré.- dice.
- No, gracias, tengo mi coche - dije esto señalando hacia mi auto.
- Ya deja ese papel de que no te importa nada, y que ni siquiera te llamo un poquito la atención.
Estaba cansada y estresada así que hice lo primero que se ocurrió entre las manos mías por la ventana de él, lo tomé de la camisa apretujé de ella y lo acerque a mí para amenazarlo.
Si, soy una persona un poco violenta en el modo de que si algo no me sale como quiero me molesto demasiado y simplemente actúo incoherentemente.
- Mira pedazo de idiota, vas a largarte de aquí ya. No me interesas para nada deja de molestarme. Estúpido.
Lo empujé hacia atrás para que vuelva a su asiento como estaba. Y me largo.
Él arranca el auto su porche de mal humor como pude notar, y me subo a mi coche. Por fin.
DEIMON
Ya cuando arranque el carro y me dirijo hacia la autopista me puse a pensar sobre ella, esa chica que me intrigó desde que la vi. No soy de engancharme con nadie y por lo que veo ella tampoco como me demostró hoy y eso me vuelve loco.
No pude parar de pensar en ella todo el tiempo desde qué pasó lo del baño.
Es jodidamente hermosa, su color de piel canela, su aroma a vainilla, su pelo rizado muy largo y sus labios... ese labial rojo que los hacía ver tan carnosos, también su cuerpo jodidamente hermoso, adoro como le queda el uniforme del colegio, su mirada es tan atractiva cualquier hombre se vuelve loco con su físico.
Desde que entro al curso todos los chicos hablaban de ella por su belleza y la intriga que les traía.
Ahí decidí ser yo el primero en estrenarla.
Si suena muy machista y repugnante, pero la verdad para mí las mujeres son como un pasa tiempo.
Así me enseño mi padre...
Vi cuando fue al baño, en el cambio de hora, entre y la vi ahí sin camisa con un sostén tan atractivo y su piel se veía bastante apetecible. No es un secreto que desde que la vi la desee, desee hacerla mía.
Y lo hice, aunque creo que ella me hizo suyo... me asombre tanto de todo el control que tenía en mí, de cómo manejaba la situación, ninguna de las mujeres con las cuales había estado era tan apasionada y decidida como Samanta. Las chicas con las que estaba acostumbrado a estar eran mujeres sin autoestima, que me tocaba darle la charla de que no somos nada y tal, pero Samanta no.
Simplemente de volver a pensar en Samanta y el baño me excita tanto, Me enloquece. Y eso es raro en mí nadie nunca me había interesado tanto como ella y su maldita forma de manejar la situación. Todo.
Me propuse algo para bajarla de esa nubecita de superioridad la volveré loca hasta romperle el corazón. Porque el que manda acá soy yo y nadie me utiliza, menos una mujer.
*nota de la autora*
Waooo eso fue un poquito raro y profundo ¿no creen? ... creo que será el comienzo de pura locuras y muchas confunciones en la cabeza de ustedes.
Ya saben de eso que te hace sentir vivo ✨
Tratare de subir la parte 2 de el cap.2 lo más pronto posible. ¡Les deseo lo mejor!
Espero que disfrutaran un poco de este capítulo💖 ya saben sean libres de decir lo que quieran.
