Super Lovers x male reader ( Yaoi/ Harem)

4._

Pov Zeno.

Me desperté porque algo me estaba aplastando, al mirar era Haru y Ren abrazados a mí, intento salirme del abrazo pero me es imposible.

Me doy por rendido y me vuelvo a quedar dormido.

No se cuanto tiempo pasó pero noto como alguien me mueve y me habla dulcemente.

- Hey Zeno levantate que ya es tarde - me dice esa voz.

Abro poco a poco los ojos y me encuentro con Haru muy cerca de mí aun acostado en la cama.

- Buenos días Haru...- le digo mientras me refrego los ojos.

-Buenos dias - me besa la frente - levantate ya que es hora de almorzar.

-¿Cómo está tu resfriado?- le pregunto mientras me abajo de la cama.

- Ya estoy bien - se levanta también- gracias por cuidar de mí.

Asiento y salgo de la habitación directo hacía la cocina.

Allí se encontraba Rob con Ren haciendo el almuerzo.

Me siento en la mesa de la cocina a mirarlos. Ellos van poniendo las cosas en la mesa.

- Oe mocoso ayuda tú también- dice entrando Haruko-san por la puerta.

- Ya está todo puesto - le digo yo.

Ella se acerca a mí y me despeina para luego sentarse a mi izquierda.

Luego de unos minutos estábamos todos sentados y comiendo entre bromas y risas.

Pov Haru.

Ya era por la tarde, Ren y Haru fueron con los perros al río así que e decidido llevarles algo para picar.

Cuando me voy acercando veo a los dos sentados, Ren escribiendo algo en una libreta mientras que Zeno le explica.

- Ey chicos que hacéis- me acerco a ellos.

Los dos me miran pero Ren es el que me contesta.

- Zeno me está aprendiendo a hablar en Ruso.

Desvío mi mirada al más pequeño y este me asiente.

- He traido algo para picar - pongo la canasta en el suelo y el primero en acercarse es Zeno.

Saca unas galletas y al mirarla bien grita:

-¡Chocolate!

Sonrió por su entusiasmos. Saco galletas de arroz para Ren y este me las coge para luego meterse una en la boca.

- A Ren le gusta mucho el arroz- habla con la boca llena Zeno.

- Y a Zeno el chocolate - le contesta Ren.

- ¡Sí! Gracias a Haruko-san e podido comerlo - lo dice con una sonrisa inocente.

- No te preocupes Zeno a partir de ahora te voy a dar todo el chocolate que quieras - le digo yo al vorde de las lágrimas.

-¿En serio Haru?- asiento a lo qué el se tira encima mío abrazandome- ¡te quiero Haru!

-¿Solo me quieres por los chocolates?- él niega- ¿Entonces?

- También me gustas por que sabes hacer cosas riquisimas con el chocolate - empieza a enumerar con los dedos - tus ojos, tú olor, tus sonrisas...¡Y muchas cosas más!

Me quedo mirandolo con los ojos bien abiertos.

- Ren tambien me gusta me comparte su arroz, me ayuda a aprender, sale conmigo por el bosque, como huele tambien me gusta...

Ahora era Ren quién se había quedado con los ojos muy abiertos.

- ¿Zeno no os gusta?- pregunta él.

-¡ Zeno si nos gusta !- contestamos los dos a la vez.

Pero no me esperaba lo siguiente que pasaría.

Se acercó a mi rostro y me besó para luego hacerselo a Ren.

-¿P-por qué...?- pregunté desconcertado.

- Vi a Ren y Haru besandose, entonces le pregunté a Haruko-san porqué dos personas se besaban y ella me contestó porque esa personas se gustan. Entonces cómo a mí me gusta Haru y Ren...

Ren me miró con el ceño fruncido.

- Zeno eso no puedes...- intentó explicarle Ren pero al pequeño se empezaron a aguar los ojos.

- ¿Entonces no puedo besar a las personas que me gustan?- preguntó con sollozos.

-No, bueno si...- no sabía que contestarle, pero no creo que añgo malo pase por algunos besos.

Con mi respuesta volvió a sonreír.

-¡ Entonces ahora Haru y Ren son mis novios !

"¡¿De donde saca estas cosas este niño?!"pensé.

-¿De donde...?- preguntó Ren.

- De un libro que leí los novios se gustan y se besan - contestas con simpleza.

Ren y yo nos miramos, suspiramos y asentimos.

El pequeño Zeno se puso a celebrar alegremente y a contarle a los perros que ahora eramos sus novios.

Se veía tan tierno que no podía decirle que no. Al fijarme en Ren tenía una sonrisa mientras veía a Zeno.

- Parece que a tí si que te gusta...- le susurro al oído.

Se gira rápidamente hacía mi sonrojado -¡No es así!

-Jmm...¡Zeno tenemos que volver se hace tarde ! - grito para coger la canasta y andar hacía la casa con los demás siguiendome.