IKIKAERU | EREN JAEGER

11| ᴍᴀ́s ᴅᴇ ᴛɪ

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ᴇᴘɪꜱᴏᴅᴇ 11
ᴍᴏʀᴇ ᴀʙᴏᴜᴛ ʏᴏᴜ

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ADVERTENCIA: este capítulo contiene escenas descriptivas de lesiones físicas, leer bajo su propia responsabilidad.
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¿ᴀᴄᴀsᴏ sᴇʀᴇ́ ʟɪʙʀᴇ ᴀʟɢᴜ́ɴ ᴅɪ́ᴀ ᴅᴇ ᴅᴇᴄɪʀᴛᴇ ǫᴜᴇ ᴛᴇ ᴀᴍᴏ? ¿ᴏ ᴍɪs ᴘᴀʟᴀʙʀᴀs sᴇ ǫᴜᴇᴅᴀʀᴀɴ ᴇɴᴛᴇʀʀᴀᴅᴀs ᴀʟ ɪɢᴜᴀʟ ǫᴜᴇ ᴍɪ ᴄᴜᴇʀᴘᴏ ʙᴀᴊᴏ ʟᴀ ᴛɪᴇʀʀᴀ ʟᴜᴇɢᴏ ᴅᴇ ᴍɪ ᴍᴜᴇʀᴛᴇ?

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MADRUGADA 4/5

                        — SE PODÍA PERCIBIR EL SONAR apresurado de unas botas de cuero pesado paseándose de un lado a otro en la estancia, persiguiendo su destino indeciso a la vez que su palpitante corazón resonaba intranquilo sobre su pecho, de una u otra forma aquellos movimientos sin sentido provocaban aún más la ansiedad constante en su sentir.

Dimitri dejó escapar un suspiro largo desde lo más dentro de su interior al observar al final del pasillo una cara conocida observarlo con petulancia.

— ¿Otra vez tú aquí Grigor? — esa voz aspera lo detuvo en su quejumbroso estar intranquilo — parece que buscas que te den una paliza para que entiendas que a estas horas los cabos no deben estar fuera de sus dormitorios — se expresó tajante el Capitan Levi, mientras observaba con desdén al muchacho a unos metros de él. Levi había sido encargado de supervisar esa noche a Eren y Freya, pero las veces que le tocaba su turno se topaba continuamente con Dimitri y por supuesto con una muy sigilosa Mikasa Ackerman, cuál misma se encontraba al final del pasillo igualmente— Eso también va para ti Mikasa.

Dimitri se pasmó sobre su lugar al escuchar el nombramiento de la fémina, no se había percatado siquiera de la presencia de la contraria en el lugar.

— Pero Levi... — detuvo su proseguir atropellado al observar la exuberante mueca de desagrado plasmarse en lo más deslumbrante del semblante del susodicho — capitán.. yo, solo quiero saber cómo está Freya — musito firmemente Dimitri, mientras un deje de decisión se asomaba por el brillo deslumbrante de sus avellanas cuáles portaba por ojos.

Mikasa por su parte se mantenía expectante ante la situación, aunque ella no haya mencionado palabra alguna, la fémina se encontraba allí por lo mismo que el Grigor, saber el estado de Eren. Sabía de ante mano que podía meterse en problemas por salir tan tarde de su dormitorio, pero poco le preocupaba aquello mientras el muchacho de orbes esmeraldas siguiera encerrado en aquellas mazmorras.

— Eso no les concierne, lárguense ambos de aquí antes de que yo mismo me encargue de ustedes — con voz áspera mencionó, mientras una mueca sutil de amenaza se había formado sobre el duro e impenetrable semblante masculino. Ante el evidente y rotundo negar del capitán a ambos reclutas no les quedó más remedio que irse del lugar e ir de vuelta a sus habitaciones, después de todo era el capitán Levi ackerman con quien se enfrentaban su superior por supuesto.— malditos mocosos problemáticos... — murmuró desdichado Levi.