ICEMAN; Javier Bonet

-𝟗

Javier

Vuelvo a mi casa un poco rayado pero a la vez feliz de lo que acaba de pasar con Alejandra

Saco de mi riñonera esta vez un paquete de tabaco para encenderme un cigarro

Fumo relajado mientras camino pensativo

¿Me odiará por lo que he hecho?

¿Como se habrá sentido con ese beso?

Miles de preguntas invaden mi mente ahora mismo

Igual si le hubieras dejado tiempo para hablar no tendrías tantas dudas. Pienso para mí mismo

Pero no podía arriesgarme a que me contestara borde o algo así

A mi normalmente me la suda que la gente me hable como le da la gana, no me afecta lo más mínimo

Pero con ella es distinto, si Alejandra me hablara mal, aparte de lo que me ha dicho hoy, porque me he merecido todos y cada uno de sus reproches, me dolería bastante

Sigo andando abstraído en mis pensamientos y cuando me doy cuenta he llegado a la puerta de mi casa

Le doy la última calada al cigarro y lo tiro al suelo para segundos después sacar las llaves y abrir la puerta

Suspiro cuando estoy dentro y decido ir a la habitación de mi hermana

-Belén, ¿Estás ahí, puedo pasar?. Pico dos veces a su puerta

-Pasa... La oigo suspirar desde dentro

-Hola. Saludo bajito abriendo y sentándome a su lado en la cama

-Hola. Resopla profundamente mirándome

-Perdóname, he sido un imbécil antes, sé que solo quieres lo mejor para mí pero me cuesta demasiado. Aseguro mirándola al suelo

-Tranquilo, ¿si?. Me mira dulce y empieza a acariciar mi nuca despacio para calmarme -Sé que no es fácil volver a abrirse después de haberlo pasado tan mal

-Para nada. Admito suspirando

-No pasa nada grandullón. Sonríe -Ya sabes que voy a estar siempre para ti, eh, ¿Que ha pasado?. Pregunta preocupada al ver mis nudillos ensangrentados

-Nada tranquila, solo que un chaval me ha venido de listo y se la ha llevado... Rio

-Bueno, vale. Suspira

-Oye... ¿Te puedo preguntar algo?. La miro

-Por supuesto. Dice cariñosa

-¿Es normal sentirse bien a lado de alguien?

-Pues claro que si Javi. Contesta feliz -¿Te gusta alguna chica?. Me mira emocionada

-No, no me gusta pero no sé joder, me hace sentir de puta madre cuando estoy con ella, me dice las verdades a la cara y siempre intenta verme bien

-Eso es genial hermanito. Dice dulce -Te mereces volver a ser feliz después de tantos años, ya no eres ese niño inseguro que eras, ahora has madurado y aunque te hayas creado esa personalidad indestructible eres mucho más valiente que antes

-Si, porque ahora no estoy gordo. Suelto una carcajada

-Eso no tiene nada que ver, han pasado los años y has cambiado, cosa que es completamente lógica, la gente cambia, no puedes pretender ser igual con 14 que con 23, todos cambiamos

-No sé Belen, pero lo peor es que no me gusta ella, o si no lo sé pero... Creo que simplemente me gusto como soy yo cuando está a mi lado, saca mi mejor versión aunque hoy me haya portado como un capullo con ella. Suspiro volviendo al tema de Alejandra