Un espacio dedicados a cualquier rockero de los 60's, 70's, 80's y 90's
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Las noches de verano suelen ser las más memorables, cada historia de amor comienza así; una madrugada de verano del '73 en una ciudad al suroeste de California, en los bares se rumoreaba la llegada de una banda inglesa muy popular en el momento.
Claramente, eso nos provocaba inquietud a todas mis amigas, con las cuales no desaprovecharíamos la oportunidad de conocer aquellos chicos, nos encantaban los hombres extranjeros ya que nos la vivíamos imaginando que sería de nosotras si ellos nos acogían por el resto de su estadía en Estados Unidos; Solo había logrado experimentar esa situación una vez, con una banda no tan conocida y en compañía de mi supuesta amiga Bebe Buell, si no hubiera sido por ella, jamás habría vivido la noche de mi vida.
En nuestra ciudad, las mejores fiestas se encontraban alrededor de una gran fogata y el sonido de las olas de la playa acompañaban al estruendo sonido del rock n' roll. Todos estaríamos ahí, y claramente, aquella banda aún misteriosa para nosotros se iba a presentar.
- ¡Bebe, espérame! – Dije acomodándome los tirantes de mi vestido a la vez corríamos a la playa, la gente ya estaba esparcida en el lugar con su respectivo grupo de amigos. - Max, tardaste demasiado en arreglarte. ¡Seguramente otras perras ya se les aventaron a nuestros chicos ingleses! - No digas eso, ni si quiera conoces lo que hacen. - Te equivocas, linda. En cuánto me enteré de su llegada, me dediqué a investigarlos por mis medios.
Era de esperarse, Bebe siempre obtenía lo quería cuando se lo proponía, pobres de estos chicos.
- Y bien, ¿Me compartes de tu conocimiento? - Todo lo esencial que debes saber es que son cuatros chicos, hay rumores de uno particularmente fascinante, y no me refiero a su personalidad. - Adivino, vas a ir por él. - ¡Por supuesto! ¿Por quién me tomas? – Comenzó a mover sus caderas incitándome a bailar con ella, estaba casi desbordándome de emoción que decidí seguirle la corriente.
Este era lo que denominaba: la fiesta ideal. Adoraba por completo pasar mi tiempo libre en esta playa, tenía un gran significado para mí, aquella razón era la principal razón por la cual nunca me he atrevido a salir de mi ciudad de origen. La mayoría de invitados regulares aún no se aparecían, era extraño de por sí, usualmente ya habría personas ebrias cantando a pulmón las canciones de The Doors y bailando de la forma que pudieran; empezaba cuestionar la veracidad de las palabras de Bebe.
