"New boy"

En donde quiera que estes

El fin de semana, Caín y Jooin habían acordado salir de paseo, para distraerse un poco tanto del trabajo como la universidad, además que merecían un descanso antes de comenzar la semana de proyectos finales que sabían que el estrés se duplicaría al cien y tenían que estar preparados para cualquier tarea que se les asigne.
En esos momentos se dirigían a la costa este, irían a visitar el mar, probar nuevos platillos o sencillamente pasar un tiempo de calidad juntos ya que hacía tiempo que lo habían hecho, debido que ahora ya no vivían juntos y los últimos días Caín había estado junto a Yahwi más tiempo de lo que Jooin alguna vez pudo imaginar. Durante el camino en carretera, Caín se encontraba sentado en el asiento del copiloto, uno de sus codos recargado en el descansa-brazos de la puerta del auto con su mano en su mentón, miraba los paisajes verdes que divisaba por unos segundos los cuales estaban cubiertos y adornados con la intensa luz del sol de mañana, Caín solamente miraba con una expresión monótona todo aquello que sus ojos pudieran ver lo que era un gran contraste con el huracán de pensamientos y emociones que tenía en su mente. Aun no procesaba lo que había pasado hace unos días, todo había sido tan repentino que no le dio tiempo de pensar, su único impulso en ese momento fue huir totalmente dejando a Yahwi sorprendido ¿sera que ahora lo odie verdaderamente? Aunque, es irónico, pues él fue quien le robo ese beso pero por cómo actuó Caín después de lo sucedido ¿será que se molesto? ¿Y porque le importaba? ¿Acaso Caín quería que eso pasara? Y si fue así ¿debería disculparse? Suspiro y chasqueo su lengua recostándose en el respaldo del asiento, Jooin lo miro de reojo confundido.

-¿Caín te sientes mal? ¿Debería detener el auto?

-Ah... No, solo estaba pensando en algo- dijo mirando de nuevo al exterior.

-¿En que pensabas?- cuestionó Jooin, Caín bajo su mirada a sus piernas mientas mordía sus labios arrancando pedazos de piel seca de ellos.

-Mmm... Como te sentirías si alguien te robara un beso, alguien me refiero a una persona cercana, pero no fue como que te desagradara del todo.

Jooin se quedó pensando un momento sin quitarle la vista al camino, solo se encogió de hombros.

-No se en realidad, supongo que le haría saber que no me desagradó lo que hizo- dijo con un tono de risa en su voz la cual también se notaba un claro nerviosismo en ella.

-Pero ¿qué pasa si después de ese beso huiste?- decía Caín levantando la mirada.

-Entonces primero me disculparía por cómo actué en ese momento y después le diría como me sentí al respecto.

Caín asintió ante las palabras de Jooin parecía algo fácil, muy fácil a decir verdad, pero dado a antiguas experiencias es más sencillo decirlo que hacerlo aunque no era imposible, giró su cabeza a su derecha quedando así de nuevo con su vista hacia afuera ¿entonces se podría decir que sentía algo mucho más complejo por Yahwi de lo que pensaba? Aquellos latidos tan peculiares volvieron a surgir en su pecho mientras recordaba la imagen de ese chico, de nuevo ese sentimiento tan familiar lo inundaba de pies a cabeza y esos recuerdos de los momentos que pasaron juntos los cuales eran pocos y ese recuerdo, esa específica sensación de los labios de Yahwi tocando los suyos, el percibir aquel suave pero inseguro tacto fue lo que hizo de ese beso un beso inocente pero lleno de tantas emociones que hasta ahora ninguno de los dos había podido plasmar con palabras.

...

Por otro lado, Yahwi no la estaba pasando tan bien, desde que regresó de su sesión de terapia se encerró en su habitación inmediatamente y de ahí no había salido. Las amas de llaves se habían dado cuenta que Yahwi había pasado más de 12 horas encerrado en su cuarto, el cual estaba completamente oscuro, todas las luces estaban apagadas a excepción de un tenue brillo de luz que provenía de la computadora del chico que solo alumbraba su rostro y parte de sus sábanas. Según las amas de llaves que solían revisar a Yahwi de vez en cuando, describían su cuarto como imposible de si quiera abrir la puerta, eso era una introducción a que tan desordenado estaba, el piso no podía verse ya que tenía basura como en envoltorios de comida o viejas sabanas, incluso una que otra almohada regada por ahí. Dado que los burós estaban llenos de cosas los platos que Yahwi llevaba a su habitación ahora estaban por el suelo, su habitación desprendía un olor un tanto desagradable, como a tela que no había sido lavada en un tiempo pero esto no parecía molestar en absoluto a Yahwi. Quitando el hecho de que se culpaba por lo que había sucedido el jueves en justo aquella habitación en la que en estos momentos se estaría lamentando, Yahwi no se había parado en ir al baño en aproximadamente más de 10 horas, cuando estás muy deprimido hasta el simple hecho de tener que levantarse para caminar hacia el baño y sentarse sobre la fría porcelana para liberar toxinas una y otra vez por el resto de tu vida hacia qué el concepto de vivir fuera un largo y sofocante bucle.