𝔽𝕠𝕦𝕣𝕥𝕪 𝔽𝕠𝕦𝕣 𝔹𝕦𝕝𝕝𝕖𝕥𝕤

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𝐏𝐨𝐯. 𝐍𝐚𝐫𝐫𝐚𝐝𝐨𝐫𝐚
Ambas personas después de salir rápidamente del departamento que le pertenecía al peli-naranja, se dirigieron hacia la casa del que llevaba camisa blanca. En el camino no mencionaron ninguna palabra ya que estaban centrados en sus pensamientos, al llegar el peli-azul abrió la puerta la pareja de amigos entró para seguidamente sentarse sobre el sofá

𝐊𝐞𝐢𝐭𝐡: No debiste de hacer eso.....*𝒎𝒊𝒓𝒂 𝒂 𝒔𝒖 𝒎𝒂𝒔𝒄𝒐𝒕𝒂 𝒍𝒍𝒆𝒈𝒂𝒓*

𝐙𝐚𝐧𝐚𝐡𝐨𝐫𝐢𝐨: Miau~ *𝒔𝒂𝒍𝒕𝒂 𝒉𝒂𝒄𝒊𝒂 𝒍𝒂𝒔 𝒑𝒊𝒆𝒓𝒏𝒂𝒔 𝒅𝒆 𝒔𝒖 𝒅𝒖𝒆𝒏̃𝒐 𝒚 𝒔𝒆 𝒂𝒄𝒖𝒓𝒓𝒖𝒄𝒂*

𝐂𝐡𝐞𝐫𝐫𝐲: A que te refieres???

𝐊𝐞𝐢𝐭𝐡: Me refiero a que no debiste reaccionar así con Nene *𝒂𝒄𝒂𝒓𝒊𝒄𝒊𝒂 𝒂𝒍 𝒈𝒂𝒕𝒐*

𝐂𝐡𝐞𝐫𝐫𝐲: Pero si tu reacción fue la misma con Pico

𝐊𝐞𝐢𝐭𝐡: Eso fue diferente

𝐂𝐡𝐞𝐫𝐫𝐲: Porque es diferente???

𝐊𝐞𝐢𝐭𝐡: Por que por lo menos a ti no te usaron para un trabajo *𝒎𝒊𝒓𝒂 𝒂𝒍 𝒇𝒆𝒍𝒊̀𝒏𝒐*

𝐙𝐚𝐧𝐚𝐡𝐨𝐫𝐢𝐨: *𝒄𝒐𝒎𝒊𝒆𝒏𝒛𝒂 𝒂 𝒓𝒐𝒏𝒓𝒐𝒏𝒆𝒂𝒓*

𝐂𝐡𝐞𝐫𝐫𝐲: Tienes razón, pero no supe como reaccionar a lo que dijo aquella chica todo fue muy sorpresivo *𝒉𝒂𝒄𝒆 𝒖𝒏𝒂 𝒑𝒆𝒒𝒖𝒆𝒏̃𝒂 𝒑𝒂𝒖𝒔𝒂* Que piensas hacer???

𝐊𝐞𝐢𝐭𝐡: No lo sé, creo que lo mejor será que este distante de el por un tiempo y tu piensas hacer lo mismo???

𝐂𝐡𝐞𝐫𝐫𝐲: Siendo sincera tengo que pensar claramente en todo lo que pasó *𝒗𝒆 𝒍𝒂 𝒉𝒐𝒓𝒂 𝒆𝒏 𝒖𝒏 𝒓𝒆𝒍𝒐𝒋 𝒅𝒆 𝒑𝒂𝒓𝒆𝒅* Se hace tarde y necesito ir a casa

𝐊𝐞𝐢𝐭𝐡: Esta bien, nos vemos

La castaña se levantó del acolchado mueble para después retirarse de aquella vivienda dejando solos al peli-azul junto a su mascota

𝐊𝐞𝐢𝐭𝐡: Tu piensas que debo alejarme un tiempo de Pico??? *𝒂𝒍𝒛𝒂 𝒂𝒍 𝒈𝒂𝒕𝒐 𝒂 𝒔𝒖 𝒂𝒍𝒕𝒖𝒓𝒂*

𝐙𝐚𝐧𝐚𝐡𝐨𝐫𝐢𝐨: *𝒑𝒐𝒏𝒆 𝒖𝒏𝒂 𝒅𝒆 𝒔𝒖 𝒑𝒂𝒕𝒂𝒔 𝒆𝒏 𝒍𝒂 𝒏𝒂𝒓𝒊𝒛 𝒅𝒆𝒍 𝒑𝒆𝒍𝒊-𝒂𝒛𝒖𝒍* Miau~

𝐊𝐞𝐢𝐭𝐡: Tal vez si *𝒓𝒊𝒆 𝒍𝒆𝒗𝒆𝒎𝒆𝒏𝒕𝒆* Bueno, dejemos de hablar sobre eso y vamos a cenar

El chico dejó a su mascota sobre el suelo este rápidamente se dirigió hacia la cocina donde se encontraba su tazón de comida vacía, aquel felino puso una de sus patitas sobre su tazón dando a entender que lo necesitaba lleno, él peli-azul acaricio la pequeña cabeza del minino este solo respondió lamiéndole la mano a su dueño.
Seguidamente el de gorra roja se alejó para sacar la caja donde venían las croquetas, cuando ya por fin el paquete estaba en sus manos fue hacia su mascota vertió la comida en el pequeño tazón. Los minutos pasaron y el peli-azul se encontraba con el plato de comida sobre la mesa, este movía la cuchara sobre el plato de manera melancólica, nuevas lágrimas amenazaban con dar su presencia pero el joven no planeaba dejar que algunas de ellas baje por su suave mejilla. Después de varios minutos los platos se encontraban en el lavavajillas mientras tanto el peli-azul fue a su dormitorio para poder darse una ducha con agua fría ya que eso era lo que necesitaba en esos momentos para poder relajarse un poco

𝙲𝚛𝚒𝚖𝚒𝚗𝚊𝚕 (𝙿𝚒𝚌𝚘 𝚡 𝙺𝚎𝚒𝚝𝚑) Dove le storie prendono vita. Scoprilo ora