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• Oficina del comandante •

Erwin se encontraba sentado tras su escritorio, rodeado de papeles, plumas y mapas. Muy poco les faltaba para salir a la siguiente misión, debían expandir territorio al este y al sur de los muros.

Erwin: ...podríamos usar la base de emergencia que construimos afuera... Al final resultó ser una buena idea de Arlert...

El apellido del rubio resonó en su cabeza por un largo tiempo, no olvidaba que era el chico que posiblemente le seguía gustando a _____, y eso lo mantenía un tanto alerta de la situación, no quería verse como un padre sobreprotector, solo quería que se acataran las reglas.
Sin embargo, Armin y _____ habían cumplido y eso no había interferido en alguna misión hasta ahora, incluso trabajaban perfectamente bien juntos, no podía quejarse del desempeño que habían tenido ellos dos en el último incidente, y debía reconocerlo.

Erwin: ... ¿Realmente, sería algo bueno?...

Siempre se cuestionaban si estaba bien o mal lo que hacían, para todo, porque al final en un lugar con un destino incierto habría que tomar decisiones precipitadas, difíciles, y debían abstenerse a las consecuencias, no había tiempo de pensar mucho.

Y en éste caso, sabía que los dos chicos ya no eran niños de 13 años, aunque él les ordenara mantenerse separados encontrarían algún momento para estar juntos, y es que también sabía perfectamente que a Armin no le quedaba mucho tiempo de vida, debido a eso, _____ no desaprovecharía ninguna oportunidad, y además, ella también estaba debilitada por el uso de su sangre, el chico no la dejaría aunque todos estuvieran en su contra.

Se cubrió la cara con ambas manos mientras soltaba un pesado suspiro recargándose en el respaldo de la silla. No sabía qué hacer exactamente con esos dos, si los dejaba ser libres con la expresión de sus sentimientos, todos se preguntarían porqué solo ellos y entrarían en conflicto. No podía arriesgarse.

Erwin: ¿Porqué ésto es más difícil que planear una misión de reconocimiento?...

Sacudió un poco la cabeza y finalmente se levantó, tal vez debería comer un poco y pensar más tarde...

• Comedor •

Levi seguía esperando una respuesta por parte de Hange, desde aquel día en que le había propuesto eso, nunca más había vuelto a tocar el tema, había pasado algo de tiempo, y la Sargento creyó que simplemente  ignorarían el tema por siempre, o que lo de aquella fiesta no había significado nada.

Hange: ... ¿Te interesa?...

Levi: pues sí, ¿Porqué otra cosa te lo preguntaría?

Hange dejaba notar mucha emoción en su rostro, tenía las mejillas rojas y movía graciosamente los dedos frente a su cara, mientras hacía algunos sonidos tratando de reprimir su emoción.

Hange: si insistes... Por supuesto que sigue en pie... Tengo en mente el bosque de árboles gigantes, te gusta ese lugar ¿No es así? Es tranquilo, fresco, pacífico, y cuando exterminemos a todos los Titanes será mejor, además, hay muchas cosas en ese bosque que son un misterio, podría hacer más investigaciones jajaja, y tú vas a ayudarme, claro que sí, la tienda de té sería un rotundo éxito cuando las demás personas también comiencen a salir de los muros, ay sería fantástico...

Levi: ... ¿Por cuánto tiempo has planeado ésto?...

Preguntó viéndola fijamente, aunque no era su misma seriedad de siempre, había recargado la cabeza en una de sus manos mientras la escuchaba.

Hange: ... No lo sé, se me acaba de ocurrir jajaja...

Discretamente, el capitán Levi dibujó una casi invisible sonrisa ladina observando la emoción de Hange... Hasta que escucharon la puerta abrirse.
Inmediatamente retomaron la compostura y siguieron comiendo, Erwin finalmente había decidido bajar a comer algo.
Ante la presencia del comandante, todos se pusieron de pie, a lo que Erwin les hizo señas para que se sentaran nuevamente.
Observó a todos y cada uno de los cadetes, todo estaba en orden, pero había algunos que curiosamente faltaban entre ellos...

PRÍNCIPE [Temporada II] Armin y túWhere stories live. Discover now