IV

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CAPÍTULO 4

DARKO

Si soy sincero, tal y como se están dando las cosas últimamente, me esperaba cualquier cosa. Cualquier cosa menos esto, joder.

No necesito ser Einstein para darme cuenta de lo que está pasando. Que Yelena esté aquí y ahora es la respuesta clara y evidente a los misteriosos tejemanejes que Adrik lleva entre manos desde hace meses. Ha pedido ayuda a su padrino, a la familia Tarantov. La mafia rusa y la mafia española, aliadas. Me tenso con tan solo pensarlo.

-¿No vas a recibirme en condiciones o qué? -me dice la morena de ojos verdes al tiempo que se acerca a mí contoneando sus marcadas caderas. Está guapísima, las cosas como son.

Instintivamente, suelto la mano de Eva y me acerco a Yelena para envolverla en un fuerte y caluroso abrazo. Hacía años que no la veía. Los latidos del corazón se me aceleran un poco cuando nuestros cuerpos se tocan.

-¿Qué haces aquí? -le pregunto cuando nos separamos, a pesar de que soy muy consciente de la respuesta.

Yelena me da un repaso de arriba abajo sin cortarse un pelo y sonríe de lado. Después desvía la mirada hacia mi lado, donde se encuentra Eva, y le ofrece una sonrisa radiante.

-No seas maleducado y preséntame a tu amiga, ¿no? -dice la rusa.

Eva da un paso adelante y le ofrece la mano con cara de pocos amigos.

-No necesito que nadie me presente -contesta entonces mi chica con cierto malhumor en su tono-. Y no soy su amiga. Soy Eva, su novia.

Se sostienen la mirada durante unos segundos y finalmente es Yelena quien rompe el contacto visual. Le estrecha la mano, haciendo una sacudida de arriba abajo y le hace una especie de reverencia.

-Yelena, su... -Me mira y sonríe- prima.

Después de este recibimiento, todos tomamos asiento en el sofá del salón y Yelena, durante casi media hora, nos explica el porqué de su llegada a España. En un principio, Markov, su hermano, envió a Ulrich y a algunos hombres más como refuerzo, con la esperanza de que el problema con Julián se solucionase más pronto que tarde. Pero dado el inesperado giro de los acontecimientos que nos tocó vivir hace apenas una semana y todo lo que ello ha conllevado, Adrik envió de urgencia a Javier y Nolan hasta Kiev para trabajar en la absolución de la condena que Markov se encuentra cumpliendo. Yo ni siquiera sabía que mi primo había estado en la cárcel. Tampoco que su padre, el padrino de Adrik, se había suicidado colgándose en su celda en prisión.

Si Javier, Nolan y el abogado de Markov consiguen encontrar una solución que permita a este viajar hasta España antes de que se celebren las elecciones tendremos una oportunidad más contra Julián, quién está haciendo lo imposible por ganar. Además de proporcionarnos la ayuda que pueda, Markov ha accedido a aliarse con nosotros en esta guerra. Va a luchar a fuego abierto si es necesario, siempre de nuestro lado.

Tras un buen rato hablando, Nina decide marcharse a intentar dormir. Ulrich, su guardaespaldas, que en realidad se llama Dominique y no Ulrich, la escolta hasta la habitación seguido por Eva, que me ha indicado que va a hablar con ella un poco antes de que nos marchemos.

Yelena y yo estamos solos el uno frente al otro.

-Tu chica tiene carácter, eh. Veo que sigues utilizando el mismo patrón a la hora de elegir mujeres.

No puedo evitar reírme. La conozco tan bien que sabía que diría algo así cuando tuviera ocasión. Me aclaro la garganta y tuerzo la sonrisa.

-En ese caso deberías estar orgullosa, ¿no? -le digo con tono chulesco-. Tú fuiste quien creó ese patrón.

G U E R R A #CiudadDelPecado3Donde viven las historias. Descúbrelo ahora