•Dulce Venganza• ✿YeWook✿ ⁝⁞⁝⁞TERMINADA⁝⁞⁝⁝

♔9♔

—Es hora...el auto está por llegar...—Yesung miraba por la ventana de la habitación de Wook, éste se encontraba inconsolable y él tenía aquella impotencia de no poder hacer nada para ayudarlo.

Lo miró de esa manera tan indefensa, tan asustado y entonces soltó un suspiró abrazándolo a su cuerpo.

—Tranquilo...hoy mismo me regreso a mi hogar también...no quiero saber nada de Sungmin y mucho menos ahora—le acarició las mejillas besando su frente poco después—vamos Wook...nos enviaremos cartas ¿si?...

—Tardarán demasiado...de Corea hasta acá...—no quería ser pesimista pero tampoco quería hacerse ideas erróneas acerca de lo que podría ocurrir, era demasiado probable que fuera la última vez que se vieran.

—Te amo...—Yesung lo interrumpió para que dejara de pensar en ese tipo de cosas —te amo demasiado...y nada de eso me va a hacer cambiar...voy a buscarte por mi cuenta ¿entendiste?...

Wook asintió suavemente escuchando al auto llegar, bajó la cabeza, había tantas cosas que quería decirle, tantas que no le era posible pensar en por donde empezar, se le abrazó con mucha fuerza y soltó un suspiro.

—Muchas gracias por haberme hecho feliz este tiempo...no sabes...lo amado que me sentí...—tomó sus mejillas y lo besó con ternura, fue un beso algo corto pero era todo lo que necesitaba ahora.

Tomó su maleta y se dirigió a la salida de la habitación, no quería voltear hacia atrás, no quería tener que ver a Yesung y entonces no querer irse, era demasiado peligroso.

Caminó hasta la salida, se despidió de su tía,de Sungmin y del abuelo del mayor, no quería que sospecharan nada así que no miró más a Yesung, subió sus maletas y después subió el, no tardó mucho en arrancar el auto así que pronto él pudo llorar a solas dentro de el.

Yesung soltó un ligero gruñido ante una mirada de victoria que Sungmin le dio, no se contuvo a derramar una lágrima traviesa y acto seguido entró a la casa para preparar su propio equipaje.

Ryeowook volvió a Corea con sus padres, volvió a hacer su vida normal en el campo y en el pueblo. Ocasionalmente pensaba en Yesung y es que era imposible olvidarse de ese lindo rostro y todo lo que lo había hecho sentir, su vida había cambiado por completo desde el día en que lo vio por primera vez.

Había pasado casi tres meses desde la última vez que lo vio, sus padres habían comenzado a conversar con otras familias acerca de matrimonio, creyó que ya no le quedaba de otra que aceptar a una de esas chicas. No había recibido ninguna carta del mayor en todo ese tiempo, quizás se había olvidado por completo de él. No quería aceptarlo en un principio pero poco a poco tuvo que ayudarse a entenderlo.

Su cuerpo había empezado a cambiar drásticamente, era como si de pronto una fiesta se llevara a cabo en su interior. Su peso aumentó, pero a su apetito le ocurrió todo lo contrario, la mayoría de la comida le daba asco y se sentía demasiado cansado para ir al campo con su padre a sembrar. La guerra por la Independencia de Corea estaba en pleno apogeo y no había mucho acceso a los médicos o a cosas de ese tipo. Él no pudo asistir a uno para desmentir sus síntomas pero una vecina partera fue la que le reveló todo. Fue cuando entonces comprendió que algo crecía dentro suyo.

Su primera reacción fue sentir miedo, sus padres lo habían educado toda su vida para no cometer esos "errores" y ahora se encontraba entre la espada y la pared. La partera le había dicho que por algo de dinero ella podría deshacerse de su "problemita" pero siendo realistas Wook no tenía esos recursos, menos en medio de la situación tan difícil del país.

Salió corriendo de ahí yendo directo a casa donde permaneció pensando en lo que debía hacer. Al cabo de una semana escribió una carta para Yesung, tenía su dirección escrita en un papel que él mismo le había dado antes de irse. Estaba tan asustado que las manos le temblaban y algunas lágrimas manchaban la hoja en donde escribía, sus letras eran bastante malas, tuvo que rehacerla un par de veces más hasta que estuvo lista para enviarse, consideró que era algo bastante importante así que la envolvió en un sobre tradicional, él sabría lo que eso significaba.

"Hola, soy Ryeowook. Lamento no haber empezado por desearte buenas noches o buenos días, es que no sé a que hora podría llegarte ésta carta. Primero que nada quiero preguntarte un par de cosas. ¿Haz estado bien?, ¿Tus días han sido cansados?...yo estoy bien el campo, mi padre me ha enseñado a sembrar repollo. Nos pasamos el día viendo las aves posarse en los árboles, pienso en ti cuando las escucho cantar, y también pienso en ti en las noches, ¿recuerdas cuando nos veíamos en ese kiosko?, era tan romántico. A veces me pregunto si piensas en mi también, si me extrañas tanto como yo te extraño a ti. Si anhelas que volvamos a vernos.

En fin, voy a dejar de divagar tanto, hay una cosa bastante importante que debo decirte, no sé como se supone que se dice esto por una carta y me asusta como es que lo puedes tomar...hace unos días descubrí que hay un pequeño ser dentro mío. La palabra se escucha tan extraño y me siento avergonzado de decir que estoy "embarazado". Mis padres no saben nada, espero que puedas entender que es lo que pasa, no voy a negarte que en el fondo me siento bastante feliz, porque al final es un hijo hecho con un poco del amor de ambos. Es un pequeño regalo que quizás la vida nos dio para permanecer juntos. Bueno...dejaré de abrumarte y solo esperaré tu respuesta, supongo que eso es todo lo que quería decirte. Ah..tampoco quiero olvidar recordarte que aún te amo. En ningún momento deje de hacerlo así que por favor, tu tampoco dejes de hacerlo. Espero en verdad puedas responderme, en poco tiempo va a notarse que este bebé está aquí y no podré hacer nada por mi propia cuenta, por favor. Necesito una respuesta sincera.

Quisiera finalizar con decirte de nuevo, que te amo, que te amo más que a nada en el mundo, que nunca dejé de hacerlo. Espero podamos vernos de nuevo alguna vez."

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