No Desearas la mujer del Prójimo, es un mandamiento difícil de cumplir para Kim Namjoon. Un hombre exitoso en su vida profesional, como empresario
Está casado con una frívola mujer, la cual no satisface sus deseos y bajas pasiones
Jungkook, un jov...
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—¿Te sientes mejor?
—Si, perdón, necesitaba esto, llorar aliviana el peso que cargo en micorazón. Gracias por escucharme
—No tiene nada que agradecer—Le acaricia el rostro—Cada vez que necesites unos brazos, aquí están los míos, no estás sola, estoy contigo
—Eres un hombre maravilloso, espero que a tu vida llegué una mujer que sepa apreciar lo bueno que en ti
—Quiero que esa mujer seas tú Te enamores de mí, me ames
— Está difícil, no lo digo por ti, eres una personal fácil de amar, pero mi vida está de pies a cabeza, hay muchas cosas en medio, el principal es Jungkook
—Hay que luchar por lo que se ama, todo tiene un precio. Quiero luchar por ti, no me lo impidas
—Es fácil decirlo. Además, pienso volver a mi país, no quiero estar aquí, extraño a mi familia. Si mi padre supiera lo que estoy viviendo, estuviera aquí, partiéndole la cara Jungkook
—Voy a protegerte, lo juro, pero no te vayas, no me dejes solo Estoy enamorado, te Amo.
Traga saliva —Es pronto para decir que me amas, no me conoces, si supieras las cosas que he hecho me odiarías.
—Lo sé, sé que has hecho cosas con Jungkook y Jimin
Macarena queda fijada en el piso—¿Cómo sabes eso?
—No me preguntes
Baja la cabeza avergonzada— Si lo sabes, entonces eres consciente de que no soy la indicada para ti
—No te hace menos mujer, no cambia lo que siento
—Anoche volví hacerlo
—¿¡Como que anoche!?
—Volví acostar con Jimin en presencia de mi marido, con su consentimiento, también lo hice sin él
¿Dime si aún sigo importándote? ¿Aún sigo gustándote? ¿Aún me ves como una mujer maravillosa?
—Sácame una duda ¿Por qué lo hiciste?
Macaren le cuenta sobre el juego que hay entre Jungkook y Jimin
Los problemas de eyaculación precoz de su marido, lo sucedido la noche anterior
Namjoom está perplejo, únicamente escucha y traga saliva
—Ahora lo sabes, dime si sigo gustándote? ¿Aún sigues enamorado de mí?
—Sabía que bajo tu voluntad no lo harías, te estaba obligando. No cambia lo que siento por. Aclaro, no soy un idiota que acepta todo, pero lo que cuentas es aberrante.
