I - Seud ó nimo

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( s e u d ó n i m o )仮名

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( s e u d ó n i m o )
仮名

     Abrió la puerta del salón de historia, la escuela resplandece entre la luz que se filtra del amanecer

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     Abrió la puerta del salón de historia, la escuela resplandece entre la luz que se filtra del amanecer. Colocó sus cosas en el escritorio y sin tiempo que perder escribió en la blanquecina pizarra los puntos a tocar en la clase de aquel martes de otoño.

    Suspiró al finalizar el último trazo y relajó los hombros, últimamente suele exigirse demasiado en el trabajo y los desvelos le están pasando factura.

    Apoyó una de sus grandes palmas en la madera negruzca del escritorio para reposar el dolor de la espalda.

    Casualmente sus orbes dorados bajaron hasta las carpetas y cerca de ella encontró una nota amarilla chillón, las que tienen adhesivo en especial; tras una expresión de curiosidad aproximó la mano disponible a la nota y la leyó.

"Cada día que pasa pienso más en ti, es tan difícil decirte todo cara a cara. Ni hablar de todo lo que sueño hacer contigo, sol de mis oscuras mañanas. Probar cada centímetro de tus labios y desgarrar la inocencia que en ocasiones emanas; razón de vida. Aquellas expresiones tan únicas que realizas ¿Hay algo más atrás de esa sonrisa? Quisiera verte llorar o enfadado con la realidad misma ¿Serías capaz de darme esa dicha?

-Anónimo"

     Arqueó una de las pobladas cejas azabaches, no era común que reciba este tipo de "cartas" en épocas alejadas al día de los enamorados. Sospechó que podría tratarse de una mala broma debido al contenido perturbador en la nota, no obstante, en lugar de seguir el deseo de botarla decidió guardarla en su bolsillo.

    El resto de la rutina transcurrió normal, a excepción del mal sabor de boca que le dejó aquella nota. En los talleres de sus alumnos pudo ser testigo de tantas caligrafías, no obstante, ninguna coincidía con la nota anónima.

    Al terminar las clases de la mañana recogió lo necesario para merendar con sus colegas, de camino a la zona de descanso evadió a un alumno de tercero que lo molesta «acosa» diariamente. El salón de profesores siempre emite gritos, risas o quejas. Rara vez domina el silencio en el instituto tomando como única excepción las clases, especialmente las de Shinazugawa e Iguro.

D̶ ̶E̶ ̶S̶ ̶C̶ ̶O̶ ̶N̶ ̶E̶ ̶C̶ ̶T̶ ̶A̶ ̶D̶ ̶O̶Where stories live. Discover now