Siento como empieza llover, como si ella supiera por lo que estoy pasando, desde aquí se puede ver la ciudad, triste y fría. Cada vez me cuesta más moverme, mis ojos arden y mi garganta duele.
Uno a uno los recuerdos me invaden, las lágrimas caen por mis mejillas.
-Que hice mal, para que me pase esto a mí - se me forma un nudo en la garganta, caigo de rodillas.
-¡No es justo! - gritó
Me pongo de pie - Estaremos juntos, Dylan - me apoyo en el barandar del puente - Ahí voy amor - empiezó a subir de a poco en el barandar del puente, logrando subir una pierna y me dispongo hacer lo mismo con la otra.
-¡Valentina, no lo hagas! - escucho como me grita mi padre, que a llegado con mi madre y Amaia.
-Me quiero morir, papá - lloró
-Mi niña, no lo hagas - observo como mi mamá y Amaia están llorando - Amiga, por favor no lo hagas - siento como me sostienen, sacándome de donde estaba a punto de arrojarme -Déjenme, me quiero morir - me abraza mi papá - Mi pequeña - lo abrazo como si de ello dependiera mi vida.
-Papá, yo... - no me deja terminar - tranquila mi pequeña, papá está aquí - mi mamá, Amia me abrazan.
-No me vuelvas hacer esto Valentina, no sabes como me preocupe cuando te saliste de la casa - solo la miro - hija, no sabes lo angustiada que estaba cuando Amaia nos llamó, y... - papá le interrumpe - lo importante es que está bien, que todo está bien.
-Quiero verlo, ¿Dónde está? - preguntó - llevenme con él, tengo que despedirme de él - lloró.
-Está bien, pero vayamos a casa primero
El viaje a casa fue en silencio, cada uno repasaba lo que había pasado.
-Llegamos - escuchó decir a mi papá, nos dirigimos a entrar
-Bueno, tengo que irme - se despide Amia
-Gracias Amaia, si no hubiera sido por ti, no se dónde estaríamos ahora.
-No se preocupe, señora. Valentina es como una hermana para mi, pero creo que por hoy todos tuvimos demasiadas emociones.
-Amaia te llevó... - mi papá se ofrece.
-No se preocupe señor, Valentina la necesita ahora, cuídense
Amaia se va y nos dirigimos entrar a casa.
Al día siguiente
No pude domir, solo quería que amaneciera para poder ir a despedirme de Dylan, aun me cuesta pensar que él no está con nosotros. Bajo las escaleras y ya mis papás están en el comedor.
-Hija, ¿Cómo amaneciste? - me preguntan
-Cómo creen que amanecí, de lo peor, no pude pegar el ojo en toda la noche; además, el amor de mi vida se murió, no lo entienden, y me preguntan ¿Cómo amanecíste? - resoplo.
Ellos no responden, camino a la puerta de salida - ¿Dónde vas? - pregunta mi papá con voz autoritario.
-A casa de... - se me hace un nudo en la garganta - Dylan - logró terminar la frase.
-Vamos, te llevó y no aceptó un no cómo respuesto - bufo
Nos subimos en el coche, nadie habla, solo se escucha el sonido de los carros, a esta hora la ciudad de París es tranquilo.
Poco a poco nos acercamos a la casa de Dylan - lloro - Y ahora tan solo imaginar que ya no lo veré nunca más. Me duele el corazón muchísimo.
-Papá, quiero ir sola - le digo al ver que él también bajaba del auto
-Hija
-Estaré bien papá - me observa
-Esta bien, estaré aqui, esperándote - asiento
Camino a la puerta y llamó al timbre, cuando se abre la puerta.
-¿Que haces tú aquí? - se quien es, la madre de Dylan
-Señora, yo vine a ver a - interrumpe y no deja que termine.
-¡Lárgate, no quiero verte! - tiene los ojos rojos, hinchados.
-Señora, por favor - suplico llorando
-Que no entiendes, nunca te quise, siempre supe que no eras buena para mi hijo - grita
-Yo - interrumpe - tú nada, no quiero volver a verte nunca más, te odio, Por tu culpa mi hijo esta muerto, por ti se fue a ese maldito viaje de negocios, tú tienes la culpa, te odio, ¡Largate! - me cierra la puerta en la cara, dejándome ahí parada con el corazón hecho pedazos.
*Flashback*
-Hijo, no puedes salir con esa mocosa - siento como me observa
-Madre, no te permito que le hables así - empieza a perder la poco paciencia que tenía.
-Es la verdad Dylan, ella no te merece, además...
-Además que madre, no me digas que sigues con la absurda idea de que Aisha y yo - es interrumpido por su madre - Si Dylan, ella es la mujer que quiero para ti - sonríe - no te das cuenta.
-Escuchame bien madre, yo amo a Valentina jamás la dejaré, y olvídate que yo, Dylan Scott, este con Aisha solo porque sea un capricho tuyo - cada vez es más notorio las venas en su cuello por el enojo.
-Dylan... - se escucho como de lo lejos lo llama su madre
Siento como Dylan me sostiene la mano y me saca de su casa, se que esta molestó por la situación, quien no lo estaría. Empieza a respirar, bufar.
-Valentina, yo - resopla - lo siento - empieza a caminar se coje el cabello y empieza a maldecir.
- Joder, ya no se como hacer para que mi madre entienda que te amo - cabizbajo se apoya en su auto.
No sé que decirle, solo lo abrazo y él me corresponde - Esta bien Dylan, todo esta bien - siento como se incorpora.
-Vamos, te llevaré a casa, y verdaderamente lo siento.
*Fin del flashback*
Y si es cierto, si, yo lo mate, si por mi culpa él esta muerto.
🌈🦋 Giane_wonderland 🦋🌈
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Destinos impredecibles
Teen Fiction🌈🦋 Y es ahí, justo en ese momento, cuando te das cuenta de que las cosas solo ocurren una vez, y que por mucho que te esfuerces, ya nunca volverás a sentir lo mismo. 🦋🌈
