XI

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...
La desesperación.
Ese horrible sentimiento de no saber qué hacer.
De sentir que el mundo se te viene encima y no te puedes defender.

...

Ese sentimiento...
Es el que estoy pasando ahora.

...

El tiempo ha pasado, pero la preocupación sólo aumentaba.

Comenzaba a ser incluso molesta; el sentir que cientos de hormigas te muerden el cerebro no es muy bonito que digamos.

Así estaba nuestro protagonista, rezando porque su amigo estuviera bien y pudiera salir de esa rápido.
A su lado tenía a su padre quien le consolaba con todo cariño.

- Tengo miedo, Sol... - dijo. - ... ¿Y si no se recupera? -
- Lo hará Agoti, ten paciencia. - respondió el adulto. - Debes darle su tiempo. Algo terrible tuvo que haber pasado como para que se desmayara. -
- Seh... eso creo... -

...

- Disculpe, ¿Ustedes son los acompañantes del jóven con calavera? -
- ¡SÍ, SÍ LO SOMOS! - respondió casi de inmediato Agoti. - ¿¡C-CÓMO ESTÁ!? ¿¡PUEDO IR A VERLO!? -
- Oh Dios mío... es el verdadero Agoti... - la enfermera se dió una leve cachetada. - Quiero decir, está estable. Por suerte no tiene ningún antecedente médico por lo que esperamos que mejore pronto. Y no, no pueden verlo. -
- ¿Por qué motivos? - preguntó el mayor.
- Está dormido. Por suerte logramos estabilizarlo antes de que algo malo pasara. Está bien, simplemente está descansando. -

La alegría volvió al pelinegro quien, casi como instinto volteó a abrazar a su padre, quien también estaba muy alegre por la noticia.

Lástima que no todo es bueno.

- Eso sí... - la doctora suspiró. - Tiene un brazo roto y múltiples heridas y cortes en todo el cuerpo. Desconocemos la razón, pero tienen toda la pinta de haber sido causadas con el mayor cuidado posible, como si quisieran torturarlo. -
- ... ¿Qué quiere decir? -
- Que deberán de cuidarlo perfectamente. Le podremos dar de alta en unos días pues debemos de hacerle una cirugía. Ya saben, por lo de su brazo. -
- Oh... -

Y así toda la alegría que había entrado en el corazón de Agoti se perdió como agua entre los dedos. Solazar notó esto y le abrazó con gran cariño.

- Tranquilo Agoti, no pasará nada... ¿Ves? Está bien, sólo necesita cuidados, es todo. -
- O-ok... pero... ¿Qué pasó con lo del desmayo? -
- Oh, le hicimos unos estudios y descubrimos que la razón de ello fue un ataque de pánico extremo. Su presión aumentó a tal punto que la fiebre que tuvo fue casi inmediata. Por suerte no fue nada malo, pero creemos que posee algún trauma severo. -
- Ok, ok... gracias enfermera... -
- Y... Agoti... -
- ¿Hmm? -
- ¿Podrías darme tu autógrafo? -
- Oh, claro. -

La enfermera sacó de los bolsillos de su ropa un esfero y un cuadernillo para dárselos a Agoti. El mismo tomó el esfero y abrió el cuaderno para dar una firma suya en una página en blanco.
Hecho eso le devolvió las cosas a la mujer, quien se fué saltando de alegría.

- Pff... un trauma Sol... ¿Qué pudo haberle dado tanto miedo como para que algo así ocurriera? -
- No lo sé. Tal vez un accidente, una mala pasada o... - Sol pensó unos momentos en lo dicho por la enfermera. - ... o un secuestro. -
- ¿Un secuestro? Wow... ¿Quién le habrá querido hacer daño? -
- No lo sé Agoti, no lo sé... -
- ... -

FNF - Betrayal [Tabi & Agoti] CANCELADAWhere stories live. Discover now