d o m i n a t e

°hai mươi tám°

No debía ilusionarse como lo esta haciendo pero era una cosa imposible cuando días atrás había podido pasar un tiempo con Namjoon disfrutando de la jardinería sin tener gritos o insultos de por medio, solo ellos justo como en el pasado

De solo recordar un vuelco da su corazón y una sonrisa boba aparece en sus belfos, tal vez y solo tal vez Namjoon tiene aún lugar para el en su corazón. Con aquel pensamiento en su cabeza camino por aquella calle que esta particularmente llena de tiendas de comida o floristerías aunque Jimin no lo culpa teniendo en cuenta que la llaman "calle de los enamorados" por lo que no debe ser tan extraño notar cuantas cosas románticas se extienden por todo el lugar 

Sin querer sus piernas se dirigen hasta la entrada de una floristería pues sus ojos captaron un bonito ramo de lirios que bien podrían ser una gran fascinación por Namjoon así que sin dudarlo ni un segundo se aventura a comprarle un ramo armado con lirios y algunas otras plantas que dan una bonita armonía que Namjoon amará totalmente

- Jimin-ah es tan gustoso verte nuevamente - el mencionado simplemente rueda los ojos al toparse con la pelinegra justo a la salida

Decide no darle importancia pasando de largo a su lado sosteniendo aquel ramo pegado a su pecho pero como siempre Irene no es una persona que se rinda fácilmente por lo que camina hasta alcanzar el mismo paso que el alfa

- Que es lo que quieres Irene, acaso me estas siguiendo? - pregunta fastidiado de tener d3 compañia a la persona menos indicada

- Venía pasando por aquí y te ví, así que queriendo conquistar nuevamente a Namjoon - sus ojos van directamente hasta el ramo de lirios que se aferran a sus pequeñas manos

- Eso no te debería importar - bufa tratando de buscar un poco más de paciencia para no ser tan explosivo - y si lo estoy haciendo eso no debería de tener revelancia en tu vida

- Yo pregunto porque no creo que Namjoon este en la misma sintonía que tu - señala justo a la esquina de la calle contraria donde se puede ver perfectamente a Namjoon acompañado de Jungkook ambos comprando un pequeño pastel además de compartir pequeñas caricias o besos ocasionales

Los ojos de Jimin van directamente al lugar señalado sintiendo como un hueco de tristeza se planta en su corazón sus ojos se cristalizan y su garganta se siente demasiado seca, cualquier ilusión que podría tener había sido rota con tan solo unos segundos de mirar aquellos dos

- Bien puedes ser tu el alfa de Namjoon - Irene susurra contra su oído colocando su mano sobre el hombro del alfa - no dejes que te lo quiten Jimin, haz algo al respecto demuestra ser un alfa digno para tener a ese omega

Jimin se mantiene con la vista clava en la pareja, la manera en que las manos de Jungkook se ajustan en la estrecha cintura del omega y los delgados brazos de Namjoon se enroscan en el cuello del alfa atrayendo para compartir un suave beso, justo como lo hacía con el

- Únete conmigo y haremos que vuelva a ti - vuelve a susurra tratando de convencer al alfa

- Aceptó - es lo único que dice girando para aventar el ramo contra las manos de la chica y después perderse entre la multitud de parejas

Irene sonríe triunfal acariciando suavemente aquellos pétalos anaranjados caminando justo al lado contrario saboreando el pronto sabor de la victoria