Capitulo 3

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Sammy:
Luego de terminar de ver Siempre a tu lado(Hachiko) Verónica y yo nos dirigimos a la cocina de mi casa para cenar junto a mis padres.

Mis padres están recién sentándose a comer.

-¿Oh cariño qué tienes?-pregunta papá

-Nada-sonrío-¿Por qué lo preguntas papi?

-Pues tus ojos están rojos, ¿Estuviste llorando?

-Aaah no se preocupe señor, estábamos viendo una película y Sam terminó llorando-dice Verónica y toma asiento

-Si papi, sabes que soy muy sentimental cuando miro películas de perritos...

-¿Perritos?-interrumpe mamá

-Sii, vimos Hachiko-informa Vero

-Aaah te entiendo Sam, yo también lloré cuando vi esa película-comenta papá

Todos sonreímos a excepción de mi madre.

-Bueno empiecen a comer o la comida se enfriará-ordena mi madre

Todos volvemos a sonreír y comenzamos a comer sin hacer un solo ruido en la mesa por "Respeto" como dice mi madre.

******
Terminando de cenar, regresamos a mi habitación y ya es demasiado tarde para que Verónica regresará a casa.

-Ooh rayos ya es tarde, no quiero ir a casa llegaré super tarde-dice preocupada

-No te preocupes llama a tu madre y pídele permiso para dormir en mi casa, no creo que se niegue, ella sabe que es muy peligroso que regreses sola a casa.

-Si tienes razón ahora mismo le llamaré pero, quisiera que me des un poco de privacidad si no te importa, es que...

-Sii, no te preocupes no tienes que darme explicaciones-interrumpo y salgo de mi habitación.

Camino hacia el patio de mi casa y me siento a disfrutar del brillo de las estrellas en el inmenso cielo.

Que relajante es esto, ver las estrellas con la brisa de la noche rosando mi rostro.

Minutos después mi vista se pausa en la ventana de la habitación de Jack, puedo verlo observando el cielo al igual que yo, tiene en sus manos una libreta y un lápiz, al parecer está dibujando o escribiendo algo.

Su cabello oscuro, sus bellos ojos cafeses, su forma de vestir, la forma en la que mira al cielo, la delicadeza con la que toma el lápiz, todo en él es hermoso y un poco oscuro...pero me fascina.

Nuestras miradas se cruzan, mis mejillas se enrojecen levemente y siento algo extraño en mi estómago, su mirada seductora y oscura.

-Hola-digo alzando la mano

¡Que estúpida me siento!

Él simplemente sonríe y cierra la ventana de su habitación, desapareciendo así de mi vista.

¿Qué hice ahora? ¿No le agrado?

Pasaba minuto tras minuto y yo seguía sobrepensando ¿Qué hice? ¿Por qué se escondió de mí?

Me recosté en el pasto y seguí apreciando el cielo y sus estrellas.

Junto a Ti [Editando]Where stories live. Discover now