Después de cincuenta años de espera, el Colegio de los Elementos, vuelve a abrir sus puertas. Jóvenes de todas las partes del mundo serán convocados a tomar sus papeles como guardianes de la naturaleza.
Sin embargo, algunos sucesos extraños y una an...
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Días después del baile de invierno. Muchos pensarán e incluso, yo misma, que estaría totalmente arrepentida por el momento íntimo que hubo entre Ethan y yo, el cual a día de hoy aún me encuentro superando. Pero, lo cierto, es que eso nunca sucedió, creo que quité mi manta de orgullo y por fin acepté que Ethan me parece muy atractivo, y su personalidad es simplemente chocante con la mía; lo cual me hace creer que de ahí surge esa relación extraña entre ambos. Me gusta llamarlo «chispa».
En estos últimos días no ha pasado nada que no sea normal; Ethan sale a correr y a veces solemos hablar, Vale últimamente ha pasado más tiempo en la cocina, preparando platillos. Por otro lado, Kang se divierte junto a Vale. Ambos salen a caminar por el bosque, suelen pasar abrazados, lo cual ha provocado un sentimiento de tristeza por parte de Kang, ya que anhelaría el haber traído su cámara de fotos para dejar en evidencia todos esos maravillosos momentos, puesto que es su gran pasatiempo. Lastimosamente, estas están prohibidas.
Sin embargo, también sucedieron algunos problemas entre Sophie y Hunter, ya que la interrupción por parte de la chica rubia el día del gran baile, no fue del todo agradable para Hunter. Pero, poco a poco están volviendo a hablar... bueno, no a hablar, pero si hay miradas entre ellos. De igual forma, prefiero no meterme en esos problemas, mejor salgo a patinar y dejar el drama en el Dair.
Inclusive, eso mismo decidí hacer hace algunas horas. Tomé mis patines y me dirigí al lago como este se encuentra congelado, me facilita el trabajo, ya que no debo ejecutar hechizo alguno.
Al acabar, decidí volver al Dair. Hace mucho no salía del árbol sin compañía, pero como Hunter estaba leyendo, intentando no pensar en toda la situación con Sophie, ni notó el hecho de que escapé para venir a esta parte del bosque Boreal.
De camino al roble de madera oscura, decido parar en repetidas ocasiones para poder disfrutar del paisaje invernal que me rodea. De la misma manera, comienzo a dar pequeñas patadas para que la nieve se eleve y caiga nuevamente al suelo.
Así fue todo mi recorrido devuelta, pero al llegar al Dair, todo se volvió muy extraño y me sentí como maestra nueva en un kínder de niños sin control. Totalmente confundida y sin saber qué hacer.
Sophie se encontraba en su cama abrazando un cojín mientras lloraba y repetía la frase «No fue mi culpa», quien a su vez se encontraba rodeada por las plantas del techo y su mesa de noche, las cuales habían crecido por las fuertes emociones que ella estabasintiendo; acabando sus ramas y hojas sobre el suelo. Ethan se encontraba recostado en una de las paredes mientras frotaba su mejilla izquierda, observando a mi amiga rubia. Hunter caminaba de un lugar a otro con cierta furia mientras hablaba en voz alta y Kang estaba intentando tranquilizar la situación.
Me acerco a Vale que estaba sentada en el suelo contemplando todo.
