[Cancelada] Una concubina sin igual jura por su único señor

Capítulo 04 - Nudos sueltos

Cada vez es más obvio, y de hecho, ya no puede negarlo; Shen Qingqiu debe caer para poder vivir. Tendrá que dejar que otros ganen, y confiar en sus propias habilidades y cultivo para lograrlo una vez que abandone el imperio. Se pregunta cuán difícil será garantizar su seguridad. Agarra su flauta y toca un par de notas cortas antes de tocar una melodía suave que no tiene ninguna sustancia real detrás. Sabe que hoy es el día en que Yue Qingyuan pasará a visitarlo, después de todo, Mu Qingfang debería haberles informado a él y a Liu Qingge sobre su "enfermedad" hoy mismo.

Escucha los pasos detrás de él, y sabe de quién se trata. Contiene la respiración mientras espera que la persona se anuncie, sus manos agarrando su flauta. 

"Xiao Jiu".

Con una ligera brisa, Shen Qingqiu se gira para ver a Yue Qingyuan detrás de él. Mira a Luo Binghe, que está arrodillado, y mira con dureza la grava sobre la que está. Shen Qingqiu mira al hombre con una actitud pasiva y despreocupada, no se arrodilla ni saluda al emperador. Sin embargo, parece que el hombre ya está acostumbrado a ello. El hecho de que se espere su falta de respeto le irrita a otro nivel. Es casi como si estuviera jugando directamente en las manos del hombre.

"Tal vez en nuestro tiempo separados, hemos olvidado nuestras preferencias. Así que le recordaré a mi querido esposo que el nombre que acaba de llamar es uno que preferiría no escuchar". Dice Shen Qingqiu, con voz firme. 

Yue Qingyuan se mueve mientras frunce el ceño, llevando sus brazos a los lados. "Lo recuerdo. Sin embargo, acordamos que es un nombre que se puede decir en privado". 

"Este es un lugar público, esposo. Sin embargo, he llegado a despreciar ese nombre en su totalidad. Preferiría que no te refirieras a mí de esa manera". Shen Qingqiu se levanta y le entrega la flauta a Luo Binghe, que la toma y se aleja. 

"Xiao Jiu, me enteré por el Doctor Mu que... estás enfermo, envenenado". Yue Qingyuan da un paso adelante y Shen Qingqiu retrocede. Yue Qingyuan se da cuenta de la reticencia de Shen Qingqiu y da un paso atrás también. Es como una danza descoordinada, diseñada para ver cuánto puede dar o recibir la otra persona. 

Shen Qingqiu sacude la cabeza y suelta una risa amarga. "Sí, así es. ¿Por qué? ¿Has venido a divorciarte de mí?" 

"¡No!" Yue Qingyuan niega, pellizcando el puente de su nariz. Mira a Shen Qingqiu que, en sus ojos, rezuma básicamente desconfianza y miedo. El hombre se calma y se aclara la garganta antes de volver a hablar. "Estoy preocupado. Además, no deberías estar así fuera". 

"¿Preocupación? No tengo ninguna necesidad de eso. De hecho, tampoco tengo necesidad ni quiero estar confinado en mi patio una vez más." Shen Qingqiu afirma mientras el veneno gotea de cada palabra. Dirige una mirada al hombre que tiene delante. 

"A-Jiu. ¿Tienes que ser así? Sé que no estás de acuerdo con lo que he hecho, pero ¿no puedes verlo desde mi perspectiva?" Cuestiona Yue Qingyuan antes de suspirar y tratar de aplacarlo. "Sea como sea, deberías limitarte y centrarte en tu cultivo". 

"¿Ser como qué? Verdaderamente, me pregunto cómo me veo a tus ojos, desde tu supuesta perspectiva". Shen Qingqiu se gira de lado antes de continuar. "No importa, no tengo ningún deseo en verme a través de tus ojos. Veo perfectamente que no encajo en esa perspectiva tuya, y tampoco me limitaré a los límites que tú pongas. Nunca lo he hecho y nunca lo haré. "

"Te ves y actúas igual que siempre. A-Jiu, no hay ninguna diferencia. No has cambiado. En mi corazón, eres el mismo". Yue Qingyuan avanza para agarrar suavemente la cintura de Shen Qingqiu, ignorando la segunda parte del discurso de Shen Qingqiu. 

Shen Qingqiu se pone rígido ante el contacto antes de mirar al hombre. "Entonces tal vez no sea yo, sino tu corazón el que ha cambiado". 

"Xiao Jiu". Yue Qingyuan parece molesto, su rostro normalmente benévolo y apuesto se torna hacia abajo en la tristeza.