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Dos semanas pasaron. Dos semanas sobrio. Ya no había necesidad pues el cubano le había dado la hermosa sorpresa de que esta vez podía quedarse.

Todo transcurría con total normalidad al fin.

El cubano le conto como en el universo que se quedo atrapado no existían mas que desconocidos. Que lo poco que había podido comunicar con el castaño era un alivio porque se sentía solo todos los días en aquel lugar pero que ahora, después de tanto tiempo, había logrado escapar y regresar.

Confi no le quiso contar nada como era costumbre. Solamente le conto de su historia y lo importante que era para el. Se había estado desvelando en encontrar el seguimiento de todo lo que escribió la noche en la que volvió Huevay.

No podía evitar tener vergüenza al recordar que el cubano había estado hablándole tanto tiempo en la noche y solo noto su regreso hasta la mañana siguiente.

Huevay se había estado paseando por la casa, dijo que la del otro universo era gris y silenciosa. 

Como desde la ida con Tocino a la feria no se había estado comunicando, decidió que, ahora que Huevay estaba tan sorprendido con su propia casa, ¿como lo estaria si se reencontrará con sus amigos?

Pensó en una fiesta enorme, en la casa de Toto porque era la que mas espacio tenía. 

Sonrió fielmente y el cubano lo noto.

-¿en que piensas?

-¿has pensado en el grupo?

Huevay lo miro con confusión.

-Digo...al fin volviste. Ellos también sufrieron por tu perdida, pero...aqui estas. Después de varios meses de intentos aqui estas, vivito y culiando. Pienso que es una ocasión que deberíamos festejar.

Huevay miro hacia otra parte, lo hacía cuando estaba nervioso, después suspiro y fue a sentarse a la mesa con el castaño.

-Confi, no estuve casi cuatro meses intentando volver de ese agujero para eso...estuve haciéndolo para venir a verte otra vez. No para presumirlo o para estar en un montón de gente. No lo tomes a mal, es una linda idea, digna de ti, pero desde que...

Huevay se interrumpió. No sabía exactamente como llamar al periodo de muerte que él tuvo porque, bueno...el estaba ahí.

-entiendo. ¿Un tiempo después tal vez?

-Claro. Y solo si la organizas tú.

Huevay puso su mano tibia en la mejilla del castaño suavemente y Confi sintió su dulce tacto. 

A pesar de que no hubiera nadie ahí además de el. 



NEFELIBATAWhere stories live. Discover now