🥀~Falling in love with the queen of the mafia~🥀 (Lumity Omegaverse)

Pérdida entre la lluvia

Capítulo 1- Pérdida entre la lluvia.

Las calles de Huesos estaban totalmente desoladas, muy oscuras a estas horas de la noche y sumergidas en un espacio realmente aterrador para los sensibles.

La lluvia fría de invierno era esparcida por toda la ciudad, con las gotas gruesas cayendo en los tejados, haciendo un ruido continuo que hubiera sido relajante para dormir sin algún aire acondicionado a las 12:00pm de la madrugada fría.

Ese no fue el caso de Amity Blight, una omega sucumbida en la oscuridad, debajo de una carpa de tienda de chucherías para los niños de un colegio que estaba a un par de metros por esos lares. Estaba empapada, temblando del frio intercalando sus huesos y sumida en su propia tristeza por la estupidez que acaba de cometer hace un par de horas.

La vida de Amity no fue muy gratificante, puesto a que ser la única omega en una familia en la que solo haya alfas mafiosos y soberbios no fue una de las mejores vidas que se puede tener para alguien como ella.

Desde pequeña, ha sufrido de maltratos y abusos por sus padres, Alador y Odalia, un alfa y una beta dueños de las empresas más ricas e ilegales de todas las islas.

Siempre le exigían mucho, y no solo era para evitar manchar el nombre de su familia, sino también para buscar cualquier excusa insignificante y descargar toda su presión en ella.

Todas las tardes después de la escuela, la esperaban sus padres con un interrogatorio en la mesa de comer. Dependiendo que contestará, le esperaba un "Más vale qué te mantengas así. Es tu única obligación" o simplemente gritos y hasta las marcas de un rejo en su piel. Y que se le ocurra mentirles, porque si se atrevía a hacerlo le esperaba una paliza peor cuando los profesores de Glandus la delataran.

Desde entonces, se ha vuelto muy callada, débil, tímida, e incluso teme de cualquier persona que la toque o mire. Nadie podía acercársele desprevenidamente porque chillaba del miedo, y si era posible, se escondía debajo de una roca hasta que el peligro pasara. Y todo empeoro cuando la inscribieron en Glandus, que fue el infierno para ella, en especial porque era el primer centro de atención para los Bullyings de la institución.

Su vocación ahí era cantar y el Ballet, pero se quedaba prácticamente congelada en su puesto cuando bailaba en público abierto, lo cual fue la frustración de varios de sus profesores, y la luz para atraer aún más burlas por parte de todos.

Cuando sus hermanos aun estudiaban con ella, eran su única salvación de las burlas y maltratos por parte de sus padres, pero hace pocas días se fueron de la mansión y dejaron sus estudios como deportistas para heredar la empresa de sus padres. Desde entonces, está sola por el mundo.

Cada quien tiene su debido limite, y Amity traspaso el suyo cuando sus padres destruyeron su peluche favorito sacado de uno de los cuentos de su infancia. Ahí, justo en ese punto, fue cuando se dio cuenta que debía escapar, que no podía seguir allí sufriendo violencia innecesaria.

Logro escapar, sí, pero el clima le jugo en contra.

Primero empezó una pequeña llovizna que no le presto mucha atención, pero esa llovizna paso a vientos fuertes y finalmente a una tormenta.

El vestido negro que traía estaba empapado, al igual que el bolso donde estaban parte de sus cosas y el resto de su cuerpo. Temblaba de frio mientras sollozaba en un silencio primitivo desde hace mucho tiempo, deseando que alguien la salvara, pero básicamente no tenía ningún familiar en Huesos Burgo aparte de sus padres y hermanos, y no tenía amigos.

Escapo sin pensar, básicamente, solo tomo un par de sus cosas para desaparecer silenciosamente por las puertas de su antiguo hogar.

No traía una cacheta consigo porque jamás se esperó esta tormenta, y todas las que había en su bolso estaban húmedas y frías.