Autismo |•Jikook-kookmin•| Traducción.

Jungkook-ah me dejas tan tímido.

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Antes de comenzar con el capítulo quiero decirles de nuevo que esto es una traducción, tengo el permiso de la autora la cual es ChaeJHStan. Estoy agradecida con ella por permitirme hacer la traducción de esta historia tan bonita. La traducción no va muy al pie de la letra, tal vez sí modifiqué un poquito ciertas cosas para que se entendiera mejor. Gracias por todo y disfruten de esta historia.
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Hoy el día comenzaría con una consulta en la clínica donde trabajaba Jungkook, claro que Jimin estaba muy entusiasmado, si él pudiese pasaría todas las horas del mundo en una sala con el moreno.

Se conocían hace unos años. Todo comenzó con la pasantía de Jungkook que era asistente de uno de los terapeutas mayores. Y Park Jimin que mantenía en constantes crisis, no tenía drogas, ni terapias.

Jungkook ya con su título, solo le faltaba especialización en los trastornos autistas y aún así, logró calmar al rubio que tenía su mente muy desordenada y ruidosa, lo único que faltó fue una canción de cuna y un masaje relajante.

Desde entonces se volvieron muy cercanos, hasta que Jimin se convirtió en el paciente de Jeon.

(...)

Él estaba dentro del carro con su madre, iban de camino a la clínica.

- Hijo, estoy muy feliz de que te lleves bien con ese doctor, parece muy bueno ya que calmó tus crisis. - Dijo SunHa para luego encender la radio y escuchar las noticias locales.

- Sí mamá, Jungkook es muy bueno, es muy agradable ¡en serio mamá! - Dijo con entusiasmo y demasiado entretenido jugando con sus dedos cortos.

- Que bueno hijo, cualquier día podrías decirle que puede ir a cenar en casa, ¿por qué no? Realmente quiero saber si es tan agradable como dices. - Después de todo sus conversaciones con el terapeuta siempre fueron breves, sobre el desempeño de Jimin o el cambio de medicamentos.

Jimin nunca le ocultó nada a su madre, ella conocía y aceptaba sus elecciones, incluida su sexualidad. Jimin nuca tuvo contacto físico íntimo con hombres o mujeres, pero siempre estuvo más inclinado hacia el gusto por los hombres, aún así nunca estuvo en una relación. Más bien porque los demás no sabían lidiar con las dificultades que tenía y porque para bien o mal, las crisis de Park eran difíciles de controlar y nadie podía calmarlo.

Luego, hace unos años, se sintió atraído por un chico de su clase que sólo supo despreciarlo por ser gordito y por su autismo. Comenzó a decirle cosas horribles al pequeño cuando recibió una carta donde Jimin contaba toda su pasión por el chico, que le parecía hermoso.

- Llegamos hijo, pórtate bien y llámame en cuanto finalice la consulta, ¿bien? - Dejó un beso en el cabello rubio de su hijo.

- Está bien mamá, te quiero mucho, adiós. - Salió del auto poniéndose su mochila negra en la espalda y entrando al gran edificio dando unos saltos. Park, siempre fue criado de forma independiente, para que no se sintiera diferente al resto de las personas, era un chico como todos los demás, pero con algunas dificultades.

Llegó a la recepción, le entregó a la recepcionista su carnet de paciente y pronto pudo seguir para ir al consultorio de Jungkook.

Jungkook sabía que Jimin tenía miedo a los ascensores o a los espacios pequeños y cerrados, así que tan pronto recibió la llamada de aviso que Jimin ya había llegado, como de costumbre fue a recogerlo, como hace dos años.

Salió pronto del cubículo, teniendo la visión de un ser bajito, rubio y extremadamente adorable, meciendo su cuerpo de un lado a otro totalmente distraído.