cap. 22

137 17 4
                                    


Abro mis ojos y lo primero que siento es un leve dolor en mi cuerpo, estoy prácticamente durmiendo encima de Killiam, me suelto un poco de su agarre y salgo envuelta en una sábana, en cuanto mis pies entran en contacto con el piso siento como todo mi cuerpo me envía señal de agotamiento, me dirijo al baño y dejo que el agua tibia enfríe mi cuerpo, me  observo y tengo notables marcas rojas.

¡desgraciado Killiam!

Termino de ducharme, entró a mi armario en busca de un conjunto para hacer ejercicio de color rojo , coloco unos zapatos del mismo tono y me hago una coleta.

Bajo a la cocina y ahí se encuentra Gianna desayunando.

— buenos días , que tal primis

— bien y tu — tomo una manzana

— ¿Harás ejercicios?

— si, iré a correr un rato

— Me mira inquisitiva — iré contigo

— no tardes mucho

En menos de cinco minutos ya nos encontramos corriendo mi mente solo divaga en lo sucedido anoche y no es que me lamente pero..

— Aquí tierra Gianna , llamando a galaxia Ariadna — la observo de medio lado

— Puedes contar conmigo siempre , no importa lo que sea, sabes que jamás te juzgaré.

— Lo sé , solo que estoy confundida.

— Esa confusión de casualidad se llamará Killiam.

— Si 

— Pero a qué se debe tu confusión , creo que ustedes habían quedado en intentar algo

— tuve sexo con el — musito

— ¡¡¡¡Qué!!!! — chilla, deteniendo su paso — Tuvis...

— Me apresuró a taparle la boca — Cállate — le pegó un codazo

— pero es que me sueltas semejante bomba y ni siquiera me dejas expresarme libremente — se queja sobando su brazo.

— levanta las cejas — deja de hacer eso pervertida.— digo con mi mala cara

— que tal fue , romántico, apasionado, salvaje, todo un macho alfa...

— interrumpo sus ideas — Gianna cálmate , no te diré.

— ¿Cómo te atreves?, Así no es como te eduque Ariadna

— hubo todo lo que mencionaste , contenta — digo siguiendo mi paso

— ¿Y?

— que quieres decir con ese Y

— Y por qué estás confundida entonces.

— Mira tú sabes que esto que hay entre el y yo es un contrato.

— Si, pero tú le gustas y aparte ustedes están en medio de algo.

— No, nos hagamos las bobas; tu sabes que esto es por conveniencia el por mantener un buen perfil y yo por salvar mi pellejo ya que el me había amenazado.

— me mira — eso sí, pero debo decir que no ha Sido tan malo después de todo estamos en New York , querida

— Si, pero esto terminará Killiam no es de las personas que quieren de verdad, simplemente el mira a las  personas como un ajedrez cuántas veces  tiene que mover la pieza para hacer su jaque mate.

— Te arrepientes de lo que pasó?

— No lo sé — susurro — debo de mantener mis muros altos los que eh construido en tantos años y el los puedo botar en 2 segundos.

Mi única opciónDonde viven las historias. Descúbrelo ahora