[Dieciséis]

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Zhan estaba feliz por volver a asistir a clases.

Excepto por matemáticas.

A pesar de que le iba muy bien, siempre se ponía nervioso cuando le tocaba salir a la pizarra a resolver un ejercicio.

Sobretodo con el profesor que tenía.

Yibo lo acompañó hasta la puerta de su salón.

Y hasta ese momento Zhan estuvo feliz, pero no esperaba que su profesor decidiera que como había faltado tanto a sus clases, el sería el primero en pasar adelante.

Lo malo era que Zhan no entendía nada de lo que estaban haciendo.

El ejercicio estaba allí, era álgebra simple.

Pero para el pequeño estaba siendo un todo un reto leerlo.

Su profesor le gritó muchas veces, porque según el, esto debería ser algo aprendido, Zhan se sintió diminuto.

-¿Quién quiere hacer este ejercicio? Al parecer este niño no sabe nada.

Zhan fue a su asiento muy desanimado.

Haikuan le hizo dibujos para que se riera, pero no lo consiguió.

Zhan solo quería ver a su Bobo.

Se le una eternidad hasta que su clase acabo y por fin pudo ver a Yibo a la salida.

El menor no pudo aguantar las lagrimitas que llenaron sus ojos cuando recordó lo mal que lo había tratado aquel hombre de los números.

Era la primera vez que se sentía así y sin pensarlo dos veces, corrió hasta donde estaba Yibo y se lanzó a sus brazos, queriendo experimentar otra vez el calor de aquel día.

Yibo se sorprendió, pero le hizo cariños hasta que Zhan pudo calmarse del todo.

Los nervios llenaron su cuerpo en un instante, pero logró pensar que con Yibo estaba seguro.

Lo que más le gustaba a Zhan, era que con Yibo, ya no sentía miedo.

ミPasitos de Pingüinoミ  Y.ZOù les histoires vivent. Découvrez maintenant