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{Habrían pasado un par de días desde del incidente del payaso. Keith, usando el poder del dinero, había logrado volver a su ciudad y, por ende, a casa. El viaje, además de agotador, también resultó ser algo incómodo; a su lado se había sentado una señora con un bebé bastante llorón y molesto, el cual le solía jalar el pelo muy a menudo.}

{Dejando ese tema de lado, ¡estaba de vuelta! Debido al hecho de haberse quedado sin batería en el teléfono antes de haber podido avisar a su familia de la situación, el encuentro transcurrió, más o menos, de la siguiente manera:}

Keith: Ah, finalmente... Dios, realmente necesito una ducha... espero que todavía quede agua caliente.

{Antes de poder introducir la llave en la cerradura, alguien abre la puerta desde dentro. El peli azul se quedaría perplejo durante un instante, hasta que dirige su confundida mirada hacia arriba. Se trataba de nadie más y nadie menos que su propia madre, portando aquel brillo dorado en sus ojos que Keith conocía de sobra.}

Alice: ¿En... dónde... has estado? 

Keith: Uh... hola, mamá-

{La mujer, moviéndose más rápido de lo que nunca nadie lo ha hecho, agarra al pequeño rapero del brazo y lo arrastra hasta dentro.}

Keith: ¡Bop! ¡Mamá, basta! ¡no soy un niño...! 

Alice: ¿Sabes lo preocupada que me tenías? ¡Dos días sin comunicación! ¡ni siquiera una llamada! ¿Dónde diablos estabas?

Keith: Uhh... ¿Nevada? mira, es una larga historia...

Alice: Pues será mejor que vayas abriendo un espacio en tu agenda, porque me vas a contar absolutamente todo.

Keith: Muy bien... *se va a la cocina para prepararse un vaso con agua* resulta que yo estoy caminando por la calle, y de repente...

{El joven escupe el agua de un momento a otro debido a la impresión. En la sala de estar, sentada ante la mesa junto a Miku, se encontraba Sarvente con una ropa casual. La chica, al verlo, le dedica una enorme sonrisa y lo saluda con la mano, haciendo que la otra también se percatara de su presencia.}

Miku: ¡Keith! ¡¿Por qué no contestabas mis llamadas?! *se levanta para verlo mejor*

Keith: Genial, ahora solo falta que llegue Kell-

{Para sorpresa de nadie, su otra hermana aparece por el pasillo antes de que pudiera terminar la frase. El aspecto de la muchacha resultaba muy familiar, pues era casi idéntica a su hermano mayor, y con esto se incluye la ropa. Las únicas diferencias notables se podían apreciar en tres detalles: el cabello un poco más largo en el caso de ella, la contextura (la chica es un poco más delgada) y, claro está, la altura. Creo que no hace falta decir quién es la más alta.} 

*nota: puta madre, no encontré ninguna imagen que me convenciera, así que... les tocará usarla imaginación.

Kelly: ¿Escuché mi nombre? ¡Oh, Keith, pensé que ya estabas seis metros bajo tierra!

Keith: ...Mierd-

{Pasaron los siguientes dos minutos discutiendo cómo el peli azul había desaparecido de repente. Mientras tanto su madre, ahora más tranquila, se encargaba de secar el desastre en la otra habitación. Aunque sus familiares no parecían muy convencidos, el chico solo contaba las cosas tal cual habían ocurrido.}

En la misma sintonía  -Boyfriend x Sarvente-Onde histórias criam vida. Descubra agora