.｡..｡.♡✿ One Shot's lemon ɑnime ✿♡.｡..｡.

＊*•̩̩͙✩•̩̩͙*˚ Ｔｅｔｓｕｒō Ｋｕｒｏｏ ˚*•̩̩͙✩•̩̩͙*˚＊

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*:..｡o○ Haikyu!! ○o｡..:*

Ρҽԃιԃσ Ρσɾ: Lunalasayayin

Haber ido a tomar con los chicos no fue buena idea, ayer fue mi cumpleaños y jamás he sido buena para tomar, aunque lo intento sólo por ellos, pero siempre termino borracha después de dos copas, y sé que después hago cosas que después al día siguiente me arrepiento, como ahora, Tetsurō me estaba enseñando como hice el ridículo frente a todos la noche anterior, ¡¿Por qué tuve que vomitar frente a Ren?!, Dios mío que vergüenza, ya no sé como lo voy a ver mañana a la cara.

—¿Por qué dejas que haga locuras? —miré a Tetsurō

—Jaja es divertido

—Para ti, pero para mi no

—Ya olvidalo amor, pasaste de maravilla tu cumpleaños, ¿Verdad?

—Si pero, Dios le vomite encima a Ren

—A él no le importó

—Si claro —dije sarcástica

—Ya, mejor hagamos algo de comer, me dio hambre

Sólo asentí dirigiéndome a la cocina con Tetsurō; él era mi novio, llevábamos tres meses siendo novios, y es muy lindo conmigo, me regala flores, chocolates, peluches, a veces me lleva a lugares maravillosos, y tuvimos nuestra primera vez en un lindo prado lleno de flores, bajo las estrellas y la hermosa luz de la luna, todo fue maravilloso y sin duda, algo que jamás voy a olvidar. Hemos tenido otros encuentros que ya no eran como la primera vez, todo era salvaje y admito que me encantaba, de tan sólo recordarlo me pone nerviosa y roja de la cara.

—¿Qué tienes?, ¿Te sientes mal? —dijo Tetsurō tocando mi frente

—No, no me siento mal

—Pero estas roja

—Jaja estoy bien

—¿Segura?

—Si, no te preocupes amor

—Bien, el ramen casi esta listo

Me senté en la mesa mirándolo con una sonrisa; pienso que así sería nuestra vida de casados y sin duda, es una vida que yo quiero tener, pero será dentro de muchos años, tal vez con Tetsurō o con alguien más, pues puede que él me deje, y de tan sólo pensarlo, duele. Tetsurō sirvió el ramen y comenzamos a comer, siempre hace las comidas tan buenas, me encanta como cocina, es fabuloso en todo.

—Después de comer, ¿Te gustaría hacer algo?

—Quisiera quedarme aquí contigo, no tengo ganas de salir

—Como prefieras

A veces era muy consentidor, y no me quejo, me consiente mucho y adoro que lo haga, pero a veces es un poco testarudo y no hace caso, pero aún así lo amo. Terminando de comer, nos dirigimos a la sala, el colocó una película y yo me acosté en el sofá colocando mi cabeza sobre sus piernas, mientras él acariciaba mi pelo, siempre que hacía eso, terminaba durmiéndome y no quiero dormir ahora, puso una de mis películas favoritas: “Este cuerpo no es mío”, y sin duda me encanta esta película y Tetsurō esta intentando que yo me ponga a dormir.

—No hagas eso

—¿Por qué?, ¿Ya no te gustan mis mimos?

—Si, pero siempre que lo haces termino durmiendo, y quiero ver la película

—Oh, pero la puedes ver después

—¿Eh?

—Jeje, quiero que me des un beso

—No, ahora estoy ocupada

—Pero si sólo estas mirando la televisión

—Por eso

—Amor —hizo puchero

—No, déjame ver la película

—Amor —alargó la o quejándose como un niño chiquito

—Ay esta bien

Sonreí dándole un beso pequeño en sus labios, pero Tetsurō lo alargó tomándome de las mejillas, y yo no pude negarme a eso, le correspondí sentándome sobre sus piernas y dejando que su embriagador beso me envolviera en una ola de miles de sentimientos. Tetsurō fue metiendo su lengua a mi boca y yo lleve mis manos a su pelo jugando con su lengua ; eran pocas veces en las que Tetsurō me besaba así, pero estoy disfrutándolo ahora.

—Sino paro ahora terminaremos haciendo otra cosa

—No pares —dije jadeando

Él levanto mi vestido y metió su mano sobre mis bragas, llevándola hasta mi intimidad, la cual acarició y su dedo índice estímulo mi clítoris, yo gemí quitándole su camisa y desabroché sus pantalones. Tetsurō quitó mi vestido, y yo baje sus pantalones junto a sus bóxer comencé a dar pequeños brincos sobre su miembro y él sólo jadeo quitando mi brasier, mordí mi labio casi llegando a mi orgasmo, pero Tetsurō me hizo detenerme y me colocó debajo suyo, quitó mi última prenda y me abrió de piernas, fue entrando en mi lento, aunque al ver mi rostro supo que yo quería algo más.

Sus embestidas las hizo rudas y salvajes, que a mi me hizo gemir alto, y él jadeaba diciendo de a veces mi nombre, escucharlo gemir era lo único que me faltaba para llegar a mi orgasmo, Tetsurō llegó después y salió de mí, me jalo a él para volver a como estábamos en un principio, yo sentada sobre sus piernas y basándonos, era sin duda genial hacerlo con él, me hacía tocar el cielo en segundos.