Las Pistas de Alice

→↔Howard↔←

→↔Howard↔←

"Había una vez, una niña.

Y sí, es verdad que hay alrededor de 2.100 millones de niños en el mundo.

Pero esta niña era especial.

No jugaba con muñecas, o a cocinar.

Jugaba a escuchar.

No solía tener muchos amigos, en realidad.

Era la niña a la que todos acudían,

sin volver a repetir,

para contarle cosas.

Y ella no decía nada jamás.

Porque no podía.

Nadie la amenazaba, o la maltrataba.

Simplemente, lo olvidaba.

¿Por qué?

Porque relevante nunca fue.

Y así fue, por muchos años...

Hasta que, un día, la niña conoció a una princesita.

Sin corona, y sin diamantes,

con bellos vestidos para bailar,

y sonrisas que iluminaban el lugar,

aunque estuviese inundado en oscuridad.

Y se hicieron amigas...

La princesita había oído sobre la niña,

y su don para escuchar y olvidar,

y en ella se interesó.

Porque al ser princesita, muchos secretos ocultaba,

aunque a su príncipe aún tenía...

A ella, todo se lo contó.

Sólo que esta vez algo extraño sucedió.

Pues la niña no lo olvidó.

¡Oh, vaya que la princesita sufrió!

Pues los guardias de su castillo eran unos dragones.

Y había uno en particular.

Bastante peculiar.

Que tenía inmensas garras.

Y un aliento de los mil demonios.

Y él no podía descubrir que la princesita le había contado sus secretos a la niña,

pues un mal humor siempre tenía.

Pero un día, el dragón se enteró.

Pero, resulta que te he mentido.

Puesto que ese no es el motivo.

La princesita travesuras realizó.

Y el dragón no lo toleró.

Pero la princesita era muy lista.

Y en guardia se puso.

Y con su amiga la amante trágica un refugio realizó

que a los demás dragones espantó.

Salvo a ese.

Ese, de mal aliento, inmensas garras y mal humor.

Y se asustó...

Así que en vez de hacerla olvidar,

ella a la niña hizo recordar.

Recordar más.

Recordar lo que pudiera.

Recordarlo todo.

Escrito en papiro está.

Y en papiro se quedará.

O eso pensaba...

Porque el destino le tenía una mala jugada.

Alguien la..."

¡UGH! Hermanita, eres una chica complicada.

¿¡Por qué no está completo?!

¿Es en serio? O sea, ¡ya era la parte interesante!

¿Te digo otra cosa más? Felicidades. Has logrado hacer llorar a Ruby otra vez. ¿De verdad eres una chica tan mala?

Casi me convences de que esto es de Ruby. Fue muy inteligente de tu parte eso de hacerla escribirlo con su letra. Pero a Ruby las metáforas no le van.

A menos que le hayas dicho que eras una princesa. ¿Estás segura de que venimos del mismo vientre? No me contestes eso.

Pero, hey, Juliette ya está mejor, si te estás preguntando eso.

Me estás empezando a caer mal. Sin ofender.

Al menos ten la decencia de decirme en dónde está el resto del cuento. Pero sé que no lo harás.

Ya no estoy entendiendo nada. Y no era de esos chicos en el jardín de niños que rebosaban imaginación.

Por favor, hermana. Dime en dónde estás. Por favor, dime qué pasó. Por favor, deja de estar jugando con todos.

O enséñame tu cadáver.

Lo que venga primero.

—Howard

¿Dos Howards SEGUIDOS? ¡EL MUNDO SE VA A ACABAR!

Oh, vamos. Me frustraré si no veo comentarios en esto. ¿Nadie tiene NINGUNA TEORÍA?

Y pensaba que yo era mala en esto...

Hola, Jo ;)

AH, y, D, gracias por el Howard.