Tabaco y canela - Marlena (Damiano David x tú)

Capitoli 13 - Barcelona

Siete meses después:

-Que nos vamos - Victoria aventó su maleta al sofá.

-¿No podías coger vuelo más temprano, Erika? - Thomas, como siempre, estaba de malas porque le habían levantado temprano.

-Calla y mueve, que te pesa el culo, hombre - dijo Damiano, apoyando su cabeza de mala gana en la espalda del rubio.

Marlena iba casi caminando dormida, pues ya estaba de nuevo en la uni, y llevaba encima demasiadas noches sin dormir y despertase super temprano, para ahora tener que venir a levantarse directamente a las 3am para coger aquel vuelo.

-Vale, sentaos aquí, iré a validar los boletos. Traéis todos vuestro pasaporte, ¿cierto? - Erika habló, mientras sacaba los boletos de su billetera.

Los cinco asintieron con la cabeza, mientras obedecían y se sentaban en aquellas frías sillas de metal.

Era Octubre, no hacía frío en Roma, pero aún así todos llevaban sudaderas, pues estaba lloviendo un poco. Thomas jaló las tirillas que hacían que la capucha de la sudadera se hiciera pequeña, y la cerró de manera que solo quedara fuera su nariz para no morir por falta de oxígeno, y tiró la cabeza al frente, queriendo dormir un poco de nuevo.

Ethan cabeceaba un poco por el sueño, pero era por mucho el más entero de los cinco. Vic estaba comiéndose las últimas galletas de su empaque, para coger energías.

Marlena estaba hecha mierda, Damiano estaba recostado en dos asientos, con medio cuerpo sobre Elena.

-Joder, os dejo tres minutos y ya os habéis dormido de nuevo.

-Il volo Roma - Barcelona, puoi salire a bordo dell'aereo. (Vuelo Roma - Barcelona, podéis abordar el avión). - Aquella voz resonó por los altavoces repartidos por toda la sala.

-Anda, moveros ahora que no tenemos tiempo de llamar a una grúa. - La mujer caminó llevando su maleta detrás de ella.

Los chicos maldijeron dos o tres veces (por lo menos), para comenzar a caminar.

La banda y su equipo tomarían un avión privado, pero saldrían una hora antes que el vuelo público. El vuelo normal a Barcelona salía a las 6am, ellos a las 5.

Entraron directamente a tumbarse todos en diferentes lugares, cayendo todos dormidos de uno en uno.

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La luz del sol entraba por una pequeña ventanilla que estaba abierta: la del asiento de Victoria, misma que observaba anonadada el paisaje...

Elena se despertó por la luz. Abrió los ojos, tardando un poco de reconocer el sitio, y de acostumbrar a sus ojos a la fuerte luz, que en las alturas pegaba con más fuerza.

Respiró profundo. Sintió la suave manta que cubría su cuerpo. "¿cómo llegó esto a aquí?"

Mrió a Damiano a su lado, aún durmiendo. Al darse cuenta de que él estaba descubierto, se dio cuenta de dónde había salido la manta. Tocó uno de sus brazos. Estaba helado. Cogió la manta y se la puso a él, con cuidado.

Se levantó del asiento, y fue a donde Vic. Se sentó a su lado, sin que ella se diera cuenta de su llegada hasta que la sintió al lado.

-¿Despierta tan temprano? Hace dos minutos dormías como un bebé - dijo Vic.

-Me he despertado con tu ventana - respondió ella.

-Lo siento... estaba aburrida, y... bueno, no todos los días se ve en vivo y en directo un amanecer como este, ¿no crees?