el chico del pijama de oso.

Capítulo 1

Caminaba hacia el lugar de encuentro donde lo habían citado sus amigos. Al llegar pudo divisar a HyunJin, YeonJun, HeeSeung y San.

—Hey chicos —saludó y se abrazó con cada uno.

—Te demoras tanto, tonto —molestó HyunJin en broma y SooBin le mostró la lengua.

—¿Vienes esta noche? —preguntó San.

—Claro que iré, mi papá no vendrá a casa por estar con las mujeres y sus amigos tomando.

—Es cansador que sigas en esa casa sabiendo como es contigo. No entiendo como lo soportas —se quejó HeeSeung.

—Esa casa es de mi madre, si alguien se debería ir es él, yo no tengo porque irme.

Decidieron comenzar a caminar hasta la tienda más cercana y compraron unos bocadillos, jugo de fresas con leche y SooBin compró unos cigarrillos.

Se sentaron en la banca más cercana y YeonJun se encargó de servir a cada uno hicieron un brindis y se lo tomaron de una.

—¿Y para cuando la novia o el novio, Choi? —preguntó Hwang.

—No me interesa nadie por el momento.

—Es bonito estar enamorado y aún más cuando sabes que él o ella te espera con brazos abiertos —habló YeonJun.

De todos, él era el único que ya tenía planeado su futuro por así decirlo. YeonJun tenía su pareja y este estaba esperando un bebé, por lo que son pocas veces en la que Choi tiene tiempo para encontrarse con sus amigos.

—Me alegro por ti, YeonJun. Se nota lo enamorado que estás por TaeHyun, pero en serio prefiero no enamorarme.

—No es tan malo, aunque parezca que sí —todos lo miraron. HeeSeung se encogió de hombros—. No me miren así, igual iba a pasar algún día...

HyunJin chilló y aplaudió feliz—: ¿Quién es el afortunado o afortunada?

—Se llama SungHoon, lo conocí en una de las fiestas de JongSeong.

—Pues felicidades, eso se merece un trago de fresa con leche —los cinco brindaron y luego rieron—. Ya tenemos diecinueve ¿Por qué tomamos esto? El único que no debería tomar trago es YeonJun.

—Uno; porque aún no cumples la mayoría, dos; prefiero ahorrar para mi pequeña, tres; si puedo tomar idiota.

SooBin soltó una risa y miró de reojo, unas orejas de oso se veían a lo lejos. Alzó una ceja y sus amigos no pasaron por alto esa seña.

Voltearon al instante y miraron en la dirección que miraba SooBin.

—Oh, es el chico —murmuró HyunJin.

—¿Lo conocen?

—No, pero lo he visto algunas veces, para rondando por varios lugares —habló HeeSeung.

—Una vez lo vi en un callejón, estaba buscando algo —habló San.

—Una vez lo vi con Tae, le estaba dando comida, pero al verme se fue.

—Porque eres feo...—murmuró San y YeonJun golpeó su hombro. Los chicos rieron.

—Yo si tuve algún contacto cercano con él, le di un poco de comida. Parecía estar buscando por la basura por lo que le invité un ramen, no habla mucho tal vez es mudo —respondió HyunJin.

—No lo creo, ayer me habló.

—¿Te habló?

SooBin asintió y se encogió de hombros—: Fue al minimarket donde trabajo, quería comprar varias cosas, pero al final solo llevo un chicle porque no le alcanzaba.