𝐶𝑜𝑚𝑒 𝐵𝑎𝑐𝑘

•4•

A Kurt y a mi últimamente nos gustaba ir a las vías de tren, a qué? Nos gustaba observar a la gente pasar en los trenes e imaginar cuál sería su destino o incluso cómo terminarían su vida.

- La señora Stephanie Cock, cómo piensas que termine su vida? - Pregunté mientras veía el tren alejarse.
- Es una alcohólica, lo más probable es que esa porquería le dañe el organismo.
- Tienes razón, y dónde crees que muera?
- Su hija vive en California, ella viaja muy seguido a ese lugar, así que tal vez en California.
- Me sorprendes Kurt!!
- Por qué?
- Realmente conoces muy bien la vida de las personas, algún secreto?
- Antes de que fuéramos amigos yo hacía lo mismo, me sentaba aquí y veía a la gente viajar.
- Y acaso la seguías por toda una semana?
- No, pero, suena interesante hacerlo.
- Bien, escojamos una víctima para está semana.
- Estás segura?
- Que más da, no toda la vida seremos jóvenes, aprovechemos.
- Te picó algo, no es así?
- Kurt?
- Bien, bien, pero si te metes en problemas no me culpes a mi.
- No te voy a culpar por qué los dos estaremos en problemas.

El señor Morrison sería la víctima de está semana, el hombre aparentaba llevar una vida feliz, pero Kurt y yo teníamos algo muy en claro, "Puedes ser feliz por un tiempo, pero, no para siempre"
Caminamos a la calle dónde se encontraba la residencia de aquél hombre.

- Vamos a entrar - Dijo Kurt mientras caminaba a la puerta trasera.
- Estás loco!!!
- Quieres quedarte afuera mirando por la ventana? Seremos muy claros mirando por ahí, ven, además Morrison no está.
Miré por la calle esperando a que nadie nos estuviera viendo y después seguí a Kurt.

Kurt entró por la puerta trasera, me quedé un rato afuera, no estaba segura de lo que estaba haciendo.
Kurt me tomó de la mano y me obligó a entrar, después muy silenciosamente cerró la puerta.
La casa era muy grande y lo que tenía de grande lo tenía de obscura.
- Dónde hay un interruptor? - Pregunté mientras caminaba a ciegas por la casa.
No tengo idea de cómo de haber estado en la cocina pasé a estar en la sala.
Y cómo no podía ver nada tropecé con una mesita de centro.
Caí arriba de Kurt algo que me daba vergüenza y pena.
- Perdón!! - Exclamé mientras intentaba levantarme.
- No, no me incómoda - Respondió Kurt con un tono amigable.
- No?
- Para nada - Decía Kurt cubriendo mi cintura con su brazo. - Podríamos estar así toda la vida - Dijo Kurt que tocaba suavemente mi mejilla.
Al principio no entendí a lo que Kurt quería referirse, pero, después, todo era más que claro, yo, le gustaba..?

~~~

Ella y solo ella, la chica de mis pensamientos, la chica de mis suspiros, Kira, era inevitable no pensar en ella, sus hermosos ojos verdes como dos hermosas esmeraldas, su largo cabello rubio y rizado, ella era todo lo que quería en mi vida.
Creí que había hecho algo para fastidiarla al grado de que me evitará o me odiara, pero no era así, ella estaba pasando por momentos difíciles, la pérdida de su abuela y el suicidio de su abuelo, tenía que apoyarla en eso, no pensaba dejarla en ese mar de sentimientos.
Me contó lo que sentía y me detuve a escucharla, la abracé y fue ahí cuando sus bellos ojos se cruzaron con los míos esos momentos que deseas que sean eternos, y me dió esa calida sonrisa que tanto anhelaba ver, fue ahí, cuando me dí cuenta de que ella era la chica que todo el tiempo busque.

~~~

Era la hora de el almuerzo en la escuela.
Estaba en mi banca como era costumbre, escribía una canción o al menos lo trataba de hacer.

- Kira!! - Me gritó Krist
- Qué pasa??
- Sabés donde está Kurt?
- No, por qué preguntas?
- Anoche salió de mi casa y nunca volvió.
- Vive contigo?
- Vive donde puede. Sabés dónde o con quién está??
- Para nada, pero, puedo ayudarte a buscarlo si quieres.
- Bien, que estamos esperando, vamos
- Krist!! Estamos en la escuela no podemos salir así como así.
- Nadie tiene por qué enterarse, al menos que alguno de nosotros dos abra la boca, pero, eso no pasará, verdad?
- Por qué piensas que yo hablaría?
- Yo jamás dije eso, sólo era una posibilidad.
- Olvida tus posibilidades, andando, no quiero problemas.
- Bien vamos.

Nos dimos a la fuga, era la primera vez que me escapaba de la escuela, tenía un mal presentimiento, pero no podía dar la vuelta y volver.

- Tú que pasas más tiempo con el, a dónde les gusta ir?
- Últimamente vamos muy seguido a las vías de tren.
- Y qué hacen en ese lugar??
- No, no malinterpretes, aún si te dijera la verdad no me creerías, es algo, loco?
- Vamos dime
- Sólo por qué tú lo pides, vemos pasar a la gente y pensamos cuál será su destino o cómo terminará su vida.
- Valla, a ustedes si que les falta un tornillo.
- Te dije que no me creerías.
- No, te creo, sólo que eso es loco y raro.

Y finalmente estábamos en las vías, cómo era de esperarse Kurt estaba en ese lugar, sentado sobre una gran roca fumando un cigarrillo.