Capítulo 8

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Un molesto rayo de sol se posaba insistente en tus párpados interrumpiendo tu sueño, instintivamente comenzaste a mover la mano tratando de alcanzar tu Nookófono, tus dedos tocaron una cumbre frondosa, sobresaltada diste un salto hacia atrás, ante ti se encontraba una escena digna de un cuadro artístico, en el suelo del apartado trasero del hidroavión se encontraba el capitán durmiendo plácidamente, su entrepierna se cubría a duras penas con una pequeña porción de tela blanca, una mano posada en su nuca y la otra tratando de tocar el cuerpo de su amante, un fino rayo de sol caía sobre su rostro haciendo parecer que te encontrabas ante un dios griego,

Un molesto rayo de sol se posaba insistente en tus párpados interrumpiendo tu sueño, instintivamente comenzaste a mover la mano tratando de alcanzar tu Nookófono, tus dedos tocaron una cumbre frondosa, sobresaltada diste un salto hacia atrás, ante...

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estabas tan anonada ante tal vista que tardaste unos minutos en notar que te encontrabas sentada en el suelo con tu cuerpo desnudo, ahogaste un grito y un rubor recorrió todo tu rostro al recordar la manera en la que el capitán había poseído tu cuerpo, no pensaste que pudiera llegar a ser tan lascivo, tu acompañante abrió lentamente los ojos y se permitió un momento para observarte de pies a cabeza, por un momento olvidaste que seguías desnuda, pero al reaccionar cubriste tu piel con la otra mitad de la cobija que tenías los pies.

-Buenos días ma chérie*- Habló suavemente tu acompañante.

Inmediatamente cubriste tu rostro ruborizado con la cobija, su mirada penetrante parecía estar tomándote nuevamente, alcanzaste a cubrirte y tomar tu ropa para luego salir corriendo del hidroavión perdiéndote en la inmensidad de aquella isla desconocida. Tropezando con ramas y rocas, conseguiste colocarte tu ropa y esconderte tras un roble cerca de la costa, observaste a tu amante bajar desesperado del hidroavión intentando abrochar su cinturón y luego prosiguiendo a abotonar su camisa, el joven te buscaba con la mirada y llamaba tu nombre desesperado.
-solo se preocupa por mí porque si me muero aquí seguro lo despiden- te dijiste en voz baja.
Enseguida sentiste una manos tomándote por la cintura y removiéndote de tu escondite, el chico colocó tu cuerpo en sus hombros como si de una presa recién cazada se tratase, ante semejante falta de respeto tú respondiste con pataleos y pequeños golpes a su fornida espalda, el no se inmutaba, cuando al fin llegaron al hidroavión tu "captor" como lo llamabas en esos momentos, te coloco en el asiento del copiloto y te miró a los ojos muy serio y declaró.
-Tal y como mencioné antes, no eres una aventura, y ahora que te hice mía, quiero que lo seas para siempre-
Rodri procedió a besar tu mano y tu en retorno solamente te quedaste callada, era tanta la impresión que no sabias que decir o que pensar.
-no necesitas decir nada, puedes pensarlo y responderme luego si tú quisieras que yo fuese tuyo solamente- el joven se dirigió al asiento del piloto y calentó los motores para despegar.
El camino fue callado y un poco incómodo, las manos de Rodri deseaban posarse en tus muslos en un acto de comunicarte seguridad, pero no haría nada si tú no se lo permitías, y eso lo mataba por dentro. Llegando al aeropuerto ambos descendieron muy callados ignorando a un preocupado Rafa que se preguntaba dónde habían estado y porque tardaron tanto. Te dirigiste a la oficina del señor Nook para informarle que no harías más viajes fuera de la isla a menos que fuese extremadamente necesario.
-Señor Nook lo siento mucho pero...- la escena que observaste paró en seco tu entrada repentina.
Una joven de tez muy blanca y cabellos naranja te daba la espalda mientras que Tom posaba sus manos en la espalda desnuda de la susodicha, la joven se encontraba sentada a horcajadas en el regazo del moreno y escondía la cara en el cuello del ya mencionado.
Anonadada alcanzaste a balbucear unas palabras, antes de que tú boca permitiera que las palabras fluyeran, la delicada joven se levantó del regazo de su aparente amante mientras posaba un dedo en los labios del mencionado en señal de que no hablara y que dejara que ella se encargara de todo. La joven comenzó a rotar su cuerpo y tú muy avergonzada cubriste tus ojos para no mirar la desnudez de su torso, pero, inmediatamente removiste sus manos de tu rostro cuando escuchaste una voz sedosa pero masculina decir.
-No te preocupes cariño, yo no tengo de esas- haciendo referencia a la carencia de senos femeninos -Disculpa si fui muy vulgar al escoger un lugar como este para "encontrarme" con Nook pero comprenderás que no me pude resistir, gusto en conocerte, soy Ladino- espetó el joven extendiéndote la mano de manera delicada y dedicándote una sonrisa juguetona.

Hola, aquí PaceRenji, lamento mucho la demora, muchísimas gracias a lxs que siguen apoyando la historia❤️❤️❤️❤️
Espero hayan disfrutado el capitulo, agradecería mucho su apoyo con un voto y/o comentario, gracias por leer, nos vemos en el próximo capítulo .

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⏰ Última actualización: Feb 29 ⏰

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