𝑶𝒏𝒆 𝑺𝒉𝒐𝒕𝒔 - 𝑺𝒄𝒊𝒔𝒂𝒂𝒄

Niños

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Scott caminaba con su pequeña jaula en sus manos, hoy era el día de llevar tu mascota a la escuela y Scott traía su pequeño conejo, su suave pelaje era de color blanco con los ojos azules, él pensaba que Blanquito (así le había puesto) era el conejo más lindo de todo el mundo.

Otro niño pequeño se posicionó a su lado y lo tomo del hombro, Scott volteó y sonrió al ver a su mejor amigo, Stiles.

—Hola— lo saludo amistosamente

—Hola, ¿Por qué tienes a tu conejo aquí?— le preguntó rápidamente al ver la jaula, Scott ladio la cabeza y lo miro con confusión.

—Hoy es el día de traer las mascotas, ¿No lo sabías?— el pequeño Stiles recordó, pero le dió igual ya que no tenía mascota, Noah no lo dejaba tener una. —Si quieres podemos compartir a Blanquito— le sonrió

—No gracias, ví que los conejos se mueren demasiado rápido y no me quiero encariñar con él— a pesar de su corta edad, Stiles, era un niño muy inteligente.

Su hiperactividad (aún no diagnosticada) lo hacía querer aprender más cosas siempre y eso lo había convertido en un niño muy inteligente.

Al ver la carita de su amigo, supo que había hecho algo mal, se notaba su confusión, miedo y tristeza al mismo tiempo.

—Pero tu conejo no va a morir, Scott, es tu conejo, él es inmortal— Scott lo pensó un tiempo y luego sonrió, Stiles a veces agradecía la inocencia de su amigo.

Entraron a clases, y todos los niños hablaban de sus mascotas y jugaban entre ellos, hasta que el sonido de la puerta los hizo mirar hacia esta con curiosidad. Era la profesora.

—Chicos, hoy hay un nuevo alumno, es su nueva compañero— la profesora se movió a un lado, dejando ver al niño tras ella.

Tenía la cabeza gacha con algo de timidez, jugaba con sus dedos mientras se mordía el labio con miedo.

—Isaac, cariño, vamos preséntate— le alentó la maestra, dándole una pequeña caricia en sus hermanos rizos dorados.

—H-hola, soy Isaac Lahey— levantó la cabeza por fin y toda la clase le respondió con un: "Hola Isaac", menos uno, si, Scott McCall, lo miro con un peculiar brillo en sus ojos marrones, quedando completamente plasmado con los ojos azules de aquel pequeño.

—Sientate por favor al lado de...— miro a toda la clase, Scott en ese momento levantó la mano y la agitó a un lado de su asiento y Stiles lo miro con una ceja alzada —Bien, ve al lado de Scott— le señaló el lugar y Isaac fue a sentarse, el niño de ojos marrones a su lado lo miraba con una gran sonrisa que le hizo sonreír a él también.

—¡Hola, Isaac!, Soy Scott— lo saludo el niño de ojos marrones.

—Hola..— dijo algo tímido

—Yo soy Stiles, soy el mejor amigo de Scott— lo saludo el otro niño agitando su mano.

—Niños— los llamo la profesora y los tres chicos que estaban hablando voltearon —Sé que están felices de tener un nuevo amigo, pero estamos en clases— los tres niños asintieron.

—Nos veremos en receso— le susurro Scott, Isaac y Stiles asintieron.

La clase estuvo divertida, todos los niños que trajeron sus mascotas las presentaron y tuvieron un tiempo jugando con ellas, hasta que la campana sonó, todos los niños empezaron a salir y a Scott se le perdió de vista Stiles.

Scott miro a Isaac que empezaba a buscar su lonchera para salir y Scott lo miro con una sonrisa.

—¿Vamos juntos al receso?— le preguntó al niño de rizos, este asintió.

—Pero, ¿Dónde está Stiles?— le preguntó, ya tenían algo de confianza, Scott levantó sus hombros en señal de no saber.

—No lo sé, salió muy rápido— dijo con confusión.

Ambos niños salieron a receso y fueron a sentarse en unos bancos, Isaac no sabía que decir, no es como si tuviera muchos amigos, entonces no sabía que hacer.

—¿Cuál es tu color favorito?— le preguntó, mientras mordía un sándwich de queso que Isaac no sabía de dónde lo había sacado.

—Emm, el azul, el amarillo y creo que el verde— dijo con una pequeña sonrisa.

—Te pareces a mi conejo— le sonrió

—¿Qué?— lo miro confundido

—Que te pareces a mi conejo, tienes unos ojos muy bonitos igual que los de él— le sonrió y las mejillas del pequeño niño de rizos se tornaron rojas.

—¡Scott!— la voz de su amigo Stiles los hizo voltear —¡Mira lo que me dió!— tenía una gran sonrisa en su rostro y Scott lo miraba con confusión.

—¿Quién te lo dió?— le preguntó Isaac

—¡Derek!— sonrió aún más, tenía una linda flor amarilla entre sus manos —Dijo que era muy bonita como yo— ambos amigos del niño rieron por su emoción —¡No se rían de mí!— dijo con enojo.

—Ya, siéntate y come con nosotros— dijo Scott y Stiles obedeció sin chistar

Scott iba a darle otra mordida a su sandwich pero se quedó mirando a Isaac el cual tomaba de su juguito de cajita de cartón con su sorbete. Scott pensó en lo lindo y adorable que era ese niño y sonrió.

—¿Quieres ser mi amigo?— le preguntó de repente. En ese momento, Stiles le quitó el sándwich de la mano ya que se le había olvidado la lonchera en el aula de lo rápido que salió, pero Scott no se dió cuenta, estaba muy concentrado mirando al de rizos.

—Si, ¿Ustedes quieren ser mis amigos?— los miro dudoso Isaac, Scott fue el primero en asentir con mucha felicidad.

—¡Claro!, Ahora seremos amigos los tres— y así fue, fueron amigo hasta la secundaria.

Y así inició la hermosa historia de Scott y Isaac, los cuales terminaron felizmente casados y con una hermosa hija adoptiva.

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Fin.

Bueno, me gustó este y la foto de Tyler me dió demasiada ternura.

Lo siento soy muy soft.

Se despide Miss Howlett 💜