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Adrien Agreste

- Mierda Plagg y ahora que hago?

- Ve a buscar a tu chica

- Y que se supone que voy a decirle? "Hay hola nada más quería decirte que siempre te abandono por qué yo soy Chat Noir"

- Pues claro, ella es tu novia y merece saber la verdad, Ladybug hizo lo mismo con su novio tu por qué no puedes hacer lo mismo con tu novia? O prefieres meterte en problemas?

- Es que no lo sé Plagg, pero creo que si tienes razón

- Yo? Yo siempre tengo razón

- Cállate

- Un momento vas a ir como Chat Noir?

- Si, por qué si voy como Adrien no va a querer escucharme, ya tiene bastante con que la deje en la escuela, mierda papá

- Mejor transfórmate ya antes de que me arrepienta

Sali por mi ventana en busca de mi novia, tenía que explicarle la verdad y unos minutos sentado en un edificio frente a su casa, me di cuenta, Plagg tiene razón, debo decirle la verdad no puedo mentirle, por qué precisamente no quiero perderla, y no quiero que las mentiras sean un factor para que ella se valla de mi lado.

- Hola Chat, como estás?

- Mucho mejor que tú, eso es seguro - ella sonrió con tristeza y se recargo en el barandal hundiendo su cara en las manos.

- Definitivamente tienes razón...

- Te pasa algo?

- No solo... - antes que pudiera decir algo, tomé su mano y hablé.

- Puedes confiar en mí, no voy a decirle nada a tu noviecito

- Es que... Agh, siento que el me está mintiendo, más bien, más que mintiendo está ocultándome algo y eso... No me gusta, sabes? Creí que confiaba en mí

- Vamos princesa el confía en ti, es más confía ciegamente en ti

- Como lo sabes? Cómo puedes estar tan seguro?

- Tal vez por qué se que eres una chica increíble y se que nunca lo traicionarías

- Gracias...

- Segura que solo sientes eso?

- Si... Aunque no se por que siento que si esto continúa así voy a perderlo y es lo que menos quiero por qué... Lo amo

- Pues creo que tengo algo que puede hacer que te sientas mejor

- Hay algo que puede hacer que me sienta mejor?

- Claro que sí

Ella y yo estábamos abrazados, me levanté y me aleje un poco de ella.

- Garras fuera... - Plagg salió de mi sortija y se poso en mi hombro.

Ella tenía una cara de sorpresa, impacto, definitivamente muchas emociones en una sola expresión.

- Tu...

- Yo - me acerque y noté que ella estaba fría, tome sus manos tratando de darles calor.

- Ahora entiendes por qué desaparezco cada que hay un villano? Siento la necesidad de protegerte por qué te amo, por qué te juro que no podría soportar si te pierdo - ya más tranquila, me abrazo y levanto su cara y clavó su mirada en la mía.

- Me perdonas por dudar de ti? En verdad sentía que no confiabas en mi

- No tengo que perdonarte por nada, te amo mi princesa

"Un amor de esgrimistas" Adrien Agreste y TúDonde viven las historias. Descúbrelo ahora