•pinch of sincerity • FMKxLitKillah•

•01•

•escabio•

Estaba tirado en el sillón esperando a que llegue Enzo, ibamos a hacer una juntada entre los dos para escabiar un rato y ponernos al rato con nuestras vidas, asé mucho que no hablamos y queríamos ponernos al día un poco.

Después de media hora llego, estaba hermoso, tan hermoso como siempre, tenía unos jeans negros con una remera blanca que decía "fuck love" en el medio en negro, unas llantas Nike Jordan negras y un chaleco negro.

- que onda wacho? Cómo tas?- me dijo con una sonrisa.

- bien, ordenando un poco hasta recién- le respondí también con una sonrisa.

Nos quedamos hablando un rato sobre nuestras vidas, no había mucho que resaltar de ninguna, sin contar lo musical, obvio.

- y bueno, todo un bardo con eso, viste? Corte, no quedamos en nada, siempre igual- estaba hablando de su novia y los problemas en la relación, la verdad, no quería saber- siempre discutimos y me cela por todo- suspiro, estaba estresado hablando de eso.

- bueno, ya fue, hoy dejemos de lado los amor y escabienos como los dos boludos que somos- dije riéndome, ya taba un poco en pedo yo.

El se rió y agarró otra lata de birra, seguimos tomando como unos desquiciados, al rato ya tabamos en pedo.

- que lit- yo lo mire como señar de que siga- alguna vez flasheaste con acostarte con alguno de los pibes?

La pregunta en saco un poco, me tomo desprevenido.

- emm, si- dije medio dudando, si el supiera jajsjs.

El me miro pícaro, tenía miedo de que el sepa que taba hablando de el, igual a ver no es mago, no lo puede saber.

- no seré yo, no?- dijo riendo- más de una vez te vi fichandome el paquete.

Eso sí que me tomo desprevenido, osea, no voy a mentir que lo si lo hice pero se supone que no sabía, se notaba que lo dijo si pensar o que ni se enteró que lo dijo, que puede ser la segunda la verdad.

- ehh, que decís wacho?- me estaba poniendo muy nervioso.

El solo se acercó a mí y me agarró la mano, no sabía a dónde me llevaba, subimos a mí cuarto y me agarro del mentón haciendo que lo mire a los ojos.

- dale, no te hagas- dijo con una sonrisa ladina.

Después de eso me beso, era un beso rápido, con mucha pasión y necesidad, el me fue empujando hacia la cama hasta que me tiró y se puso encima mío.

No entendía que estaba pasando pero sea lo que sea me gustaba.