CALOR
¿Cuanto tiempo se puede vivir atado al pasado? Pero aún más importante, ¿es aferrarte a algo o alguien bueno o malo?
Descubre los sucesos que llevan a un joven a convertirse en policía con el único objetivo de encontrar al responsable de la mu...
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Hubo dudas al principio. Nos sentíamos superiores a Samuel Köch. Creíamos que teníamos ventaja sobre él, pero al final, y contra nuestra voluntad, no nos quedó de otra más que concederle la razón: su padre era alguien con poder.
Los beneficios de dicha prominencia fueron puestos en manifiesto una tarde, cuando los fiscales, esos hombres estirados y enfundados en sus trajes, irrumpieron en la estación.
—Nosotros nos encargaremos a partir de hoy. Se les pide que cesen de investigar el caso —demandó el fiscal, Dilan, con el papel que autorizaba una orden de cateo—. Nos llevaremos a Samuel Köch y confiscaremos todo referente al caso de Sandra Hoffmanh.
—Dilan. —Iván lo laceró con la mirada pero el tono de su voz pretendía hacerlo razonar.
A Dilan le bastó efectuar un ligero gesto de indicación con su cabeza para movilizar a los cuatro hombres que iban detrás de él.
El cuarteto se dispersó por la sala, introduciendo todo a su gana en esas grandes cajas azules que solían usar para recolectar evidencia.
—¡Oigan! —alegó Jessica, cuando la hicieron a un lado para registrar su computadora.
—Nuestra investigación sigue en curso. No pued...—objetó Dave mientras un par de folders amarillos le eran arrancados de las manos.
—No han tenido progresos y están reteniendo a un ciudadano inocente. ¿No han sobre pasado ya las cuarenta y ocho horas? —aseveró Dilan, dándose la media vuelta.
—Tenemos los resultados forenses de la víctima —replicó James, alzando en el aire el documento, mismo que le fue arrebatado en el acto por uno de los hombres—. ¡Estaba embarazada de ese "ciudadano inocente" y se encontró ADN compatible con el de él en las uñas de la víctima!
Dilan dobló el cuello hacia atrás, fijando la mirada en el techo y soltó aire antes girarse hacia su interlocutor.
—Le recuerdo, detective Brad, que al menos que haya sido violación, que no lo fue, ser el padre de un feto no es un crimen que la ley castigue. Además, el ADN fue compatible, no el mismo —conceptuó Dilan.
—¡No podemos probar su culpabilidad, pero tampoco su inocencia!
—La fiscalía averiguará en ello. Hasta entonces manténgase al margen y lejos de este hombre.
—¿De verdad vas a decepcionarnos otra vez? —le preguntó Iván a Dilan.
El caso de Sandra Hoffmanh fue uno de esos en los que requerimos asesoramiento legal, he ahí la razón del porque Iván estaba envuelto en la escena.
—De nuevo, yo solo sigo órdenes. Este es mi primer caso individual así que debo hacerlo bien. —dijo este—. El propio fiscal general me lo confió. No puedo equivocarme. Ustedes también debería tener cuidado. Samuel es su hijo y les aseguro que el fiscal Köch tiene mucho más poder del que aparenta darle su cargo.
