"ℂlumsy" -BakuDeku-

ℂ𝕒𝕡𝕚𝕥𝕦𝕝𝕠 𝟠

Tal vez no debió ir en busca de ese chico al cual amaba mucho. Tal vez debió posponer su declaración para otro día.

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Izuku pasó horas despierto a lo largo de la semana, pensando en cómo acercarse y hablar sin miedo. Decir un "hola, me gustas" sonaba sencillo en su mente, pero al intentar practicar mientras se miraba en un espejo no pudo siquiera articular una palabra por que tartamudeaba a los pocos segundos. ¡Vamos! Izuku estaba intentando tranquilizarce mientras tomaba un poco de té ¿como lo haría? Si se podía nervioso practicando consigo mismo ¿como sería al estar frente a Todoroki? Tal vez de desmayaria de los nervios. Que ridículo.

Era algo torpe así que también el miedo de causar algún problema  estaba en su mente, solo lo asustaba más y más. Creaba escenarios en su mente, su favorito era donde Todoroki acepta sus sentimientos y se declara de igual manera y el que le desagradaba era aquel en donde era rechazado cruelmente, pero estaba seguro que Shoto no sería así.

Pensó varias veces en dejar eso de su declaración y seguir como si nada, pero sabía que Shoto era comprensivo así que tal vez si se lo decía el lo tomaría de buena manera y seguirían siendo amigos. Todo normal. Pero también estaba esa posibilidad (aunque mínima) de que el bicolor lo rechacé y lo evite, se sentiría realmente mal al saber que arruinó su amistad y sería super incómodo el trabajar juntos. Evitandolo todo el tiempo.

Sacudió su cabeza y trato de alejar esas ideas.

Necesitaba más tiempo para pensar cuidadosamente y meditar sobre los posibles escenarios.

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─ ¡Este lugar está muy vacío! ¿Verdad? ─ suspiro y prosiguió a mirar al chico de cabello morado.

─ Si. ─ dió una breve respuesta y siguió jugando en su teléfono.

El crujido de la puerta llamó la atención de la pelirosa y volteo a ver al pecoso, quien había ido a ordenar algunas cosas a la bodega.

─ ¡Buen trabajo! ─ felicitó mientras dedicaba una radiante sonrisa, Izuku devolvió de igual manera la sonrisa.

─ ¿Sigue vacío? ─ miro a su alrededor, solo mesas vacías.

─ Si... ─ habló con una mueca de aburrimiento.

─ ¿Y Todoroki-kun? ─ preguntó curioso.

Mina sonrió.

─ Está por allá. ─ apuntó a una de las mesas.

Izuku aprovecho el estar en la bodega y práctico un poco lo que diría. Ya había pasado una semana, no era el momento exacto para decirlo pero lo intentaría. Todoroki por lo general siempre se marchaba a casa o los acompañaba a sus noches de comida y bebida. Ese día no había nada planeado así que le pediría si pueden hablar en privado y así declararse. Toda una semana practicando tenía que dar sus frutos el día de hoy.

Sonrió levemente, nervioso y un poco feliz. No había razón.

Por suerte los clientes llegaron unos 15 minutos después, un grupo de personas entró y empezó a pedir lo que deseaban, llenaron el lugar de un ambiente más animado y este ya no parecía un lugar solitario y triste, ahora se escuchaba la risa de la gente presente.

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Luego de una intensa hora laboral se sentaron por unos minutos antes de cerrar para luego poner manos a la obra, cada uno realizaba una labor: Shinso e Izuku se encargaban de la limpieza de los pisos y el lugar donde se preparaban las bebidas, Todoroki tendría que limpiar las mesas y Mina debía dejar las sillas sobre las mesas y cerrar la cafetería.