12

202 35 0
                                    

- vete - señalo la puerta mi mente es un desastre pro no puedo hacer nada por que ese hombre sale de mi casa, me quedo ahi, sentado no se cuantas horas mirando todo y a la vez nada 

voy al trabajo, todo el dia parece mas y mas cansado, puedo sentir el peso mientras me dan esa cosa azul en aquel hospital y la enfermera parece compadecerse de mi pero realmente no siento nada, solo siento las noches  cada vez mas caoticas y siento que no puedo recaer no debo hacelo no si quiero ver a A-ling 

me quema la garganta, me queman las manos me quema todo el cuerpo, pero no ocntinuo, tomo todo el agua posible y aun asi recaigo

...................................

estoy en el hospital,  miro a wei wuxian moverse un poco pero eso es todo lo que hace, dijeron que asi seria para ambos, sin embargo desconocen si ellos despertaran bien mentalmente o con recuerdos perdidos, eso me aterra pero la manzana encima de la mesa pelada y recortada, y alguna conf orma de conejo pero aun asi eso es todo no hay mas movimientos o pestañeos o dedos moviendose no hay nada de eso, asi que me pongo de pie cuando el gran ramo de  flores que acomoda cada vacio de este cuarto, tan coloridos y algunos ya un poco secos, pero aun asi la enfermera saca los secos y un poco descoloridos 

y aun asi jamas cruzamos palabras, nunca jamas lo hacemos ni siquiera una mirada, solo continuamos con nuestro camino y siempre marco ese numero que wei wuxian marcaba y se escondia en su cuarto o en el atico de la maldita casa en la que vivimos y es tan desconcertante que siempre volviese con una sonrisa tremenda que nadie podia quitar 

pero no en mi, jamas en mi la cara rigida, el ceño fruncido eso era mejor a que tener que ver como mis padres peleaban, jamas me puse en conta de ellos, solo deje que mi cara se quedase de aquella forma, de esa forma como si odiase al mundo y la vida 

me rindo en la alfombra de el cuarto frio en donde duermo, al inicio fue comodo fue familiar, hasta me gustaba su color, pero ahora me sentia prisionero en sus paredes, en sus ventanas, en su suelo de madera, como si las pesadillas volviesen, como si todo, como si las pisadas, el susurro de la fusta del caballo resuena, es tan aterrador y escapo de nuevo de ella, termino con la cara enterrada en la nieve, el frio enfria mi mente y por din estoy mejor, me congela y congela el miedo que siento en esas paredes  me paro mientras el agua me cala la ropa, humedo pero mi cuerpo tirita pero no siento el mas minimo frio, la cara esta mojada es tan patetico susurro 

cuando me levanto hay unos zapatos negro demasiado limpios para estar en una tormenta de nieve, tal vez podria ir al hospital pero no entiendo por que ese hombre aun esta frente a mi, tal vez el necesite ingresar a la cafeteria al lado de esta casa, asi que me paro y sacudo la nieve sobrante, tal vez deberia cambiarme, trastabillo otra vez pero es tan patetico y cliche me cojen antes de estampar mi cara contra la nieve de la acera 

levanto la cara y aquel rostro me golpea de improvisto, y puedo sentir el dolor agonizante en la espalda como una herida abierta, me recompongo y me alejo un paso - me disculpo - me inclino un poco  y deseo irme, el dolor sordo en mi espalda es tan vivido, pienso que tal vez puedo estar alucinando por dicho dolor

- jiang cheng - su voz es tan calmada y se parece al tono al de mi padre,  el miedo es latente y me repito que ese hombre esta muerto, esta muerto grito internamente, es mi antiguo compañero de cuarto, o bueno de la casa en donde estuve durante casi un año, el hombre sonrie y no muestra otra emocion y es tan parecida a ese hombre, siento el miedo latente pero no pedo hacer nada, no puedo hacer nada

- señor Lan - me inclino con respeto ante el, es un Lan despues de todo y quiero preguntale si conoce a un tal Lan zhan pero no dice nada, solo quiero escapar de este lugar pero no me dejan hacerlo, el hombre me invita hacia la maldita cafeteria y quiero gritar que estoy tan malditamente mojado

- me acompañaria - susurra pero aun asi puedo oirle, lo hago me sumergo en una charla banal mientras esperamos mi taza de cafe y el un te, digo los tes saben a mierda pero supongo que el puede consumirlo, es bueno que todo tiene un lugar, como es dicho para gustos y colores no se han escrito autores, por que pues wei wuxian era asi nadie estaba hecho para ser entendido al 100%, el hombre tomo el te con satisfación mientras yo trataba de revolver el maldito azucar para darle textura a esta cosa, a veces siento que no puedo sentir el dulzor de las cosas, deje de darle vuelta y mire al hombre que no hacia mas quemirar los sobrecitos rotos del azucar 6 sobres rotos, alarmado no deje que se dejase ver la cara de horror, negue  y puse la sonrisa mas incomoda que pense podria parecer mas tranquila y sincera

- señor Lan - tome un sorbo pero no pude sentirlo - me pregunto por que me a invitado a este lugar - mis dedos estaban blancos y palidos, delgados

- supuse que me preguntarias aquello - dejo el te elegantemente como esos niños de peliculas victorianas, sus dedos se limpiaron suavemente con una servilleta de papel - eh estado buscandole - me miro intensamente pero sus ojos eran tan claros y bonitos como diria wei ying, tal como hablaba de el chico que ellos jamas conocieron 

- me gustaria preguntar el por que - susurre tomando el cafe insipido 

- usted - parecia dificl decir las siguientes palbras - usted estudio en el colegio de gusu hace 15 años 

-  eh estudiado - respondo mecanicamente, sin embargo solo eso me dijeron mis padres, pero no recuerdo nada de esos dias, solo recuerdo el cuarto oscuro que hay en la antigua casa en donde vivi

- usted conocio a un tal Su she - entonces lo miro intensamente, ese nombre es el nombre de la misma persona que termino metiendole un cuchillo en el estomago a Jin zixun

- no lo recuerdo - queria gritarle que no recordaba ni mierda, no dije nada 

- usted me recuerda - se señalo asi mismo, me miro intensamente pero negue lentamente y el brillo en sus ojos se desvanecio, no iba a mentirle y decirle ni una ridiculez a ese hombre - ya veo - 

- pedo retirarme - trato de levantarme 

- puede darme su numero de celular - pero tengo miedo, ese hombre es amigo de aquel Jin que ah estado cada paso a paso 

- yo... no - retrocedi un paso y casi choco con la camarera

- por favor - rogo y casi podria caer ante ello pero no lo hago, me levanto y tomo mi casaca y salgo de ese lugar, directo a la puerta de los apartamentos y corro como si atras de mi estuviese algun espiritu maligno o un mounstro 

Another love🍁Where stories live. Discover now