14. Una llamada no muy agradable en Navidad.

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En una entrevista del 2011 (aproximadamente) para una radio, Snake cuenta una pequeña anécdota que tuvo con Sebastian después de la expulsión de éste.

En Navidad de 1996, Snake recibió una llamada del rubio vocalista. Al aceptar la llamada, él empezó a tirarle mierda al guitarrista, mientras que éste comía tranquilamente con su familia. Lo peor era que lo tenía en manos libres, por lo tanto todos los que estaban en la mesa alcanzaron o escuchar las palabras de Sebastian.

La madre de Snake estaba preocupada: “Ella conocía muy bien a todos en la banda, y preguntó si todo estaba bien. Yo dije "Sí, mamá, no te preocupes".
Cuando todos se fueron, le llamé. Dije "Escucha: Sé que estás ahí parado, mirando el aparato. Quiero que sepas que no volveré a tocar en una banda contigo"”.

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