07

4.6K 610 31
                                    


Un nuevo amanecer empezaba a hacerse notar en la aldea de Konoha, siendo los rayos del sol lo que hizo que la gemela menor soltara un pequeño gruñido de frustración

Oops! This image does not follow our content guidelines. To continue publishing, please remove it or upload a different image.

Un nuevo amanecer empezaba a hacerse notar en la aldea de Konoha, siendo los rayos del sol lo que hizo que la gemela menor soltara un pequeño gruñido de frustración.

Odiaba cuando el sol empezaba a salir, pues no podía seguir golpeando con sus palmas aquel árbol especialmente preparado para ello.

Y es que, Fuyumi le había prohibido entrenar bajo el sol después de que un día quedará con varias quemaduras debido la sensibilidad de su piel.

Miró a los al rededores, no podía ver a Fuyumi por ningún lugar.

"Parece que aún no a llegado, bueno supongo que no se molestará si me quedo aquí unos minutos más".

—¡Hinami-Sama no debería entrenar bajo el sol!— escucho decir a Fuyumi.

La gemela menor dio un pequeño saltó en su lugar y al instante volteó hacia donde había escuchado la voz de su cuidadora, está había pasado caminando por uno de los pasillos exteriores y sin dejar de caminar se había encargado de regañarle.
Al observar a la adulta seguir su camino, pudo notar como está vestía su uniforme de Jounin, y si a ésto le sumaba las grandes ojeras bajo sus ojos no era difícil pensar que Fuyumi había tenido una misión durante la noche y no había podido dormir bien a causa de ello.

Suspiro aliviada al no haber notado ningún tipo de herida.

Después volteó a ver nuevamente al árbol que utilizaba para entrenar, unos minutos bajo el suave sol matutino no le hacen daño a nadie ¿Verdad?

—¡Hinami-Sama!

—¡Muy bien, ya entendí!

—Buenos días— dijo la pequeña azabache abriendo la puerta de la cocina

Oops! This image does not follow our content guidelines. To continue publishing, please remove it or upload a different image.

—Buenos días— dijo la pequeña azabache abriendo la puerta de la cocina.

Se encontró con las cocineras, Natsu y otras mujeres más, quiénes al parecer estaban demasiado concentradas en cualquier cosa que estuvieran hablando, quizás fue por ello que dieron un notable saltó cuando la menor habló.

𝓗𝔂𝓾𝓰𝓪 𝓽𝔀𝓲𝓷𝓼Where stories live. Discover now