Se nos acaba el tiempo

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JACK

Mirar a Tessa en ese estado, mirarla aquí, pero lo peor pudo haber caído de la zotea, no se que pensaron en ese momento preferiría que lo hicieran en el piso, pero sin Tessa, estaba recostado a su lado, ella dormía profundamente, yo solo la observaba, su cabello, sus ojos, sus pestañas, su nariz, sus hermosos labios, unos que me encantaban probar son tan adictivos, son tanto como una droga, ella es mi mejor droga, pero también me duele, ella quiso darme un tiempo para pensar, eso me lo dijo Will, esta semana intenté, ir a su departamento pero no pude, algo no me dejaba sentía que lo de el espacio solo era una escusa para alejarse, irse, quizás ella ya no quería estar conmigo.

Cerré mis ojos y sentirla a mi lado me hizo poder descansar.

Desperté más temprano que de costumbre, la mire ahí descansando, con sus labios entre abiertos y su cabello despeinado, escuché movimiento afuera así que salí, me encontré nada más y nada menos con el dúo irresponsable y mal influencia para mí Tessa.

¿Mi?

Si Mi Tessa.

—Tengo que hablar con ustedes ya—. ambos asintieron.

—Primero, no quiero drogas en mi piso, segundo no incluyan a Tessa, tercero no fumen el la zotea y cuarto ¿porqué venía Tessa con ustedes?— ellos me miraron mal.

—Okey—, suspiro Sue. —Si, si y si, porque llovía y los tres estábamos un poquito estresados y nos pusimos a charlar en el estacionamiento, una cosa llevo a la otra y ya.

—Espera, ¿no quieres a Tessa aquí?—. pregunto Mike.

—Claro que la quiero, pero ella se fue— Me miraron mal.

—Tu te molestas te, le dijistes cosas horribles, sabes que decir que te llame Ross es como terminar su relación—. yo puse mueca de confucion.

—¿Es joda no?—. Sue se paró y fue a la cocina.

—No es joda Ross—. dijo Mike, para párese y comenzar una discusión por qué Sue no le daría helado.

Me quedé pensando sobre el tema, pero si ella no era la víctima aquí, porque la tratan como tal, escuché un sollozo a mis espaldas, mire para allá, era Mike y Naya, Will salía con alguien en brazos y Sue le seguía, entonces mi cerebro por fin cargo quien estaba en los brazos de Will era Tessa, camine lo más rápido que pude y los seguí hasta el hospital, cuando entré los mire caminar de un lado a otro, me miraron todos me estaban mirando.

—¿No lo escuchaste?—. dijo Will.

—¿Escuchar qué?— Sue río amargó.

—No escuchó—. dijo Naya.

—Salió de la habitación, y justo en el pasillo cayó, se sostuvo del mueble pero, pero después no aguanto más el golpe fue fuerte, el piso en silencio hizo eco por todo el—. explicó Will.

Yo negué con la cabeza.

Mientras las lágrimas no paraban de rodar por mis mejillas y ahogaba gritos de desesperación.

Tessa

No estaré bien, lo se, lo siento, el doctor Hidalgo no me a informado nada, creo que piensa que estoy dormida, siento, me siento débil joder, siento que apenas ponga un pie en el suelo mis piernas no lo soportaría, entonces comprendí, de eso que los niños del hospital me contaban lo comprendí, ahora lo comprendo.

LO QUE FUIMOS Where stories live. Discover now