In The Dark ღ MarkHyuck

1.

  Suspiré y me cruce de brazos recostandome en los casilleros mientras Jaemin guardaba sus cuadernos y cerraba el suyo.

  Antes de que pudiera hablar con él, Jeno llegó y se apoderó por completo de su boca yo solo pude hacer una mueca ante el brusco movimiento del mayor cuando lo pego al casillero y lo tomó fuerte de la cintura.

—¿Ya pueden superarlo? —Rode los ojos—, ni que no se hubieran visto en días.

—Deja los celos Mark, encontrarás alguien a quien no vas a querer soltar ni una hora —Habló Jeno sin mirarme, Jaemin estaba organizandole el cabello que hace unos momentos él mismo le revolcó.

—Tengo novia y aun así no soy como ustedes.—Le recordé.

—Ah verdad ¿donde dejaste a tu chica? —Preguntó Jaemin.

—Esta enferma y como hoy solo veremos esas presentaciones irrelevantes entonces no va ha venir.

  Los tres comenzamos a caminar al salón principal ya se nos estaba haciendo tarde. El lugar estaba repleto por todos los estudiantes escuchando las palabras de uno de los maestros.

—Solo hay dos sillas desocupadas y estan en el fondo—Jaemin hizo un mohín.

—No importa Nana, tu te sientas en mis piernas.

  Y tal y como lo dijo Jeno, Jaemin se sentó en sus piernas y yo en la silla que quedaba. Unos minutos más tarde cuando comenzaron las presentaciones y todos los estudiantes ya estaban haciendo ruido, llegó Donghyuck, saludando a su paso a un montón de chicos y chicas porqué si, claro, él era un chico demasiado popular y llamativo.

—Ay, llegué muy tarde ¿verdad?, ¿No hay más puestos? —Frunció el ceño después de saludar a Jeno y Jaemin y claro, guiñarme un ojo sin que estos se dieran cuenta. Solté aire cuando se agachó un poco y me susurro al oído:—¿Puedo sentarme en tus piernas Mark? Solo mientras veo las presentaciones.

   ¡Y Joder! Obvio le iba a decir que no, pero su voz era tan dulce que lo único que pude hacer fue asentir y dejar que se sentará sobre mi regazo.

—Gracias Mark. —Sonrió con ternura. Recostó su espalda en mi torso en el mismo momento en el que tomó asiento en mis piernas, sus pequeñas y suaves manos tomaron las mías con cuidado llevándolas a sus muslos y haciendome recorrerlos con un movimiento firme, su espalda se curvo pero él se dio vuelta un momento para mirarme y relamer sus labios de una forma sugestiva y sexy—Puedes dejarlas ahí si quieres.

  Y ahí las deje. Sus muslos, una parte de su cuerpo que era toda una fantasía, una locura total.

  Soy abiertamente bisexual y no tengo ningún problema en considerar a alguien atractivo ó no a mi parecer, pero es muy diferente estar tocando de esa manera a otra persona sabiendo que tengo una pareja a la cuál respetar. Así que siguiendo moralmente mis principios, quite mis manos de sus muslos y corregí un poco mi postura.

  Mire a Jeno y Jaemin pero estaban demasiado ocupados hablando y riéndo como para darse cuenta de lo que sucedía a su alrededor.

  El cuerpo de Donghyuck se movio sobre mí entrepierna y aspire mucho aire para evitar volverme loco.