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«Fugaz»

Bajé las escaleras hacia el vestíbulo dónde me esperaba el padre de Adrien, mientras todos los invitados estaban reunidos en el salón, esperando que concluyera el ensayo

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Bajé las escaleras hacia el vestíbulo dónde me esperaba el padre de Adrien, mientras todos los invitados estaban reunidos en el salón, esperando que concluyera el ensayo.

Caminamos con calma hasta el jardín, todo estaba precioso, las sillas, las flores, las luces... y sobretodo, aquel rubio de pie al final del camino de pétalos, esperando por mí. Mi corazón dio un brinco y por un instante las dudas y los nervios se disiparon, y me embargó una sensación de regocijo tal, que sentía como si estuviera caminando sobre las nubes, y eso que solo era un ensayo...

- Te ves absolutamente deslumbrante mi lady - susurró en cuanto me tuvo en frente.

- Gracias gatito - dije conmovida por el brillo que se desprendía de su mirada.

El ensayo terminó muy rápido. Adrien me ofreció su mano y caminamos así hasta el salón.

Gabriel tomó la palabra dando un breve discurso de bienvenida, luego fue el turno de la tía de Adrien, quien nos dedicó unas emotivas palabras y dirigió el brindis para luego invitarnos a tomar asiento para cenar mientras el cuarteto de cuerdas empezaba a tocar.

La mesa larga había sido reemplazada por varias mesas circulares vestidas, donde estaban ubicados los invitados estratégicamente en grupos de ocho.

Después de cenar, Adrien insistió en presentarme a algunos invitados más. Conocí a algunos socios de su padre y a los demás familiares, hasta que su tía se acercó a nosotros.

- Quisiera robarme a la novia por unos instantes - dijo llegando con un par de copas

Adrien me miró en busca de aprobación. No tenía ganas de seguir hablando con los invitados, moría porque todo terminara pronto y poder recostarme en la soledad de mi habitación, sin embargo también deseaba caerle bien a su tía así que negarme no era una opción... entonces, le sonreí en respuesta, dándole a entender que estaba bien.

- De acuerdo - dijo besando mi mano - con la condición de que no hablen de mí a mis espaldas...

- No prometo nada, querido - dijo su tía entregándome una copa de champagne y ofreciéndome su brazo.

Me guió hasta un rincón apartado del salón, cercano al pasillo, mientras hablaba de lo hermoso que se veía todo.

- Ahora dime, querida ¿Cómo te sientes? - preguntó una vez que estuvimos lo suficientemente lejos de la gente

- Estoy bien, solo algo cansada... - dije sorprendida por su comentario - ha sido un día terriblemente largo

- Entiendo, es lógico. Necesitas descansar, porque mañana será un día aún más largo - añadió con una sonrisa, levantando su copa - pero antes quería brindar contigo. A partir de mañana serás parte de la familia

Choqué mi copa con la suya con una sonrisa y bebí el burbujeante líquido dorado.

- Esta familia no es perfecta - dijo con algo de pesar - sin embargo nos cuidamos unos a otros, espero que lo entiendas - agregó con una mirada extraña

(1) Deux coeurs, un battement - MLB +18 [Dos corazones, un latido]  Donde viven las historias. Descúbrelo ahora