Solo Dean Winchester. (Destiel)

Única parte.

La definición de familia en cada persona es tan difícil como universal.

Para Sam y John, era aquella que estaba frente a la televisión, en las series, quienes peleaban y se arreglaban siempre que el sol volvía a salir ¿Para Dean? Era esto:

Sus dos personas más amadas, los tres en un motel de mala muerte, pero juntos, realmente no importaba si todo en su cuerpo dolía por el trabajo, ya sea escolar o.... trabajo de lo que sea, no importa. Se le enseño que tiene que ser incondicional, aun cuando se le grita que no es necesario, aun cuando sabe que nunca será el favorito de nadie, aun si recibe golpes a lo largo de su cuerpo.

Los merece, no es lo que hacen todas las familias, pero es lo que hace la suya, es lo que merece.

Aun cuando sabe que no merece esa hermosa familia, un padre orgulloso, un hermano que lo ame, no puede evitar ver con envidia a Sam, jugando monopolio que John en la mesa mientras que él está destinado a terminar su tarea porque su cerebro es lo suficientemente estúpido como para no dejarlo terminar a tiempo, y si no lo hace antes de que termine el juego tendrá una marca de bota en el estómago.

Entiende a John y no lo culpa, perdió a su esposa y corre por la vida intentando de enmendar ese error, conseguir paz a costa de todo, solo a veces desearía... quisiera tanto no ser ese costo.

Cuando las palabras no dejan de moverse y su pie sigue sube y baja con ansiedad por todo su cuerpo ya que las palabras "Tú mamá murió para no tener que verte fallar" "Apuesto a que los dejo porque eres un monstruo" entre otras siguen rodando por su mente le hacen desear ser normal.

Le hacen desear que papá no se vaya, aun si significa que cualquier error causara un moretón, le hace desear que Sammy no lo odie, hace su mejor intento, lo jura, en serio hace todo lo que puede, le hace desear que mamá no muriera, pues en su imaginación hay dos de ellas, una lo ama y abraza por las noches, le canta hasta que se queda dormido ¡Es su favorito! Y la otra lo odia más de lo que Sam y papá lo hacen, porque él es extraño, horripilante y un inútil y no merece ni siquiera el amor de su madre.

Tal vez papá y los niños de la escuela tienen razón, si ella siguiera viva los hubiera abandonado de cualquier manera.

Han sido días normales, su tristeza y soledad siempre ha existido y realmente no ha sido peor estos días, puede decir que hasta ha estado mejor pero los comentarios no dejan de rodar y después de que John aventara una lata de refresco por la tarea que le costó más de tres horas terminar hace que salga corriendo, después de limpiar la mesa y recibir un regaño como si él la hubiera tirado.

Termina en el solitario parque cerca del motel y de una gasolinera, esta tan solo que lo más probable es que lo terminen secuestrando y en este punto de su vida realmente no le importa, simplemente deja que sus lágrimas salgan.

¿Es normal que sienta esto? ¿Es normal que tenga que estar tan solo en un parque repasando sus pensamientos? Solo quiere... oh dios, realmente solo quiere que lo amen.

No quería que mancharan la perfecta imagen que tiene de su madre, no quería que John se enojara... solo quiere abrazos y besos de buenas noches, que alguien lo escuche y se siente junto a él cuando la tarea, quiere ser un mejor ejemplo para Sammy.

No importa cuánto tiempo lo intento, cuantas veces rezo para ser mejor, para no ser un bastardo inútil, nada de eso cambio.

El recuerdo de esos días llega como un golpe cuando Dean se sienta en el columpio de aquella vez. Ahora el pequeño parque se veía ligeramente mejor y casi no reconoce el lugar por los nuevos departamentos que hay, pero había marcado sus iniciales cuando se cansó de llorar y ellas nunca desaparecieron.