21

389 31 37
                                    

Lo bueno es que te quedaste con una gran mujer, de buen carácter, de las mejores pilotos de toda la Rebelión

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Lo bueno es que te quedaste con una gran mujer, de buen carácter, de las mejores pilotos de toda la Rebelión.

Bueno panas, sigue el siguiente maratón de cuatro capítulos de esta historia.

Comencemos.



Nebarro.

Tienes visitas. -dijo una mujer.

¿Quién es?. -pregunto el hombre.

Es el Jedi. -dijo la mujer.

Ven Grogu. -dijo Din Djarin alzando al niño.

Ojalá y algún día crezca más. -dijo Cara Dune.

El no crecerá tanto. -dijo Anakin entrando al bar.

Conociste a alguien más de su raza. -dedujo Din Djarin.

Solo a uno en realidad. -dijo Anakin.

Entonces ¿Cuanto tiempo te lo llevarás?. -pregunto Din Djarin.

Todo depende de Grogu, entrenar para ser un jedi no es algo sencillo. -dijo Anakin.

Al menos podré visitarlo?. -dijo Din Djarin.

Por supuesto. -dijo Anakin.

El mandaloriano suspiro, ahora ya no tenía ganas de entregar a Grogu.

No seas llorón, lo volverás a ver. -bromeo Cara.

Yo jamás lloro. -dijo Din Djarin.

Estirando sus brazos entregó a su compañero de misión.

Cuidaré bien de él, lo prometo. -dijo Anakin.

Portate bien niño. -dijo Din Djarin dándole la bolita de la palanca de su nave.

Grogu la recibió en su pequeñas manitas.

Nos veremos después. -dijo Anakin saliendo del bar con el niño.

Regreso en un segundo. -dijo Din Djarin entrando a un cuarto del bar.

En ese momento llegó Greef.

Demonios, ese pequeñito se fue y no alcance a despedirme. -dijo Greef.

Lastima. -dijo Cara.

¿Y mando como se lo tomó?. -pregunto Greef.

Quieres que te responda o quieres ver. -dijo Cara.

Mejor vemos. -dijo Greef.

Cuidadosamente entraron al mismo cuarto donde Din Djarin entró, caminaron un poco hasta escuchar ¿llantos?.

Ambos adultos ahogaron una risa.

No decías que nunca llorabas. -dijo Cara sonriendo.

No estoy llorando, se me metió algo al ojo. -dijo Mando debajo del casco.

Segunda Oportunidad.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora