Capítulo 6. Miel

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Bueno bueno, agarrense un abanico, mucha paciencia y poco pudor..

Ahh y dos cositas.

1. Espero sea de su agrado.
2.No se olviden de votar y dejar un review

Enjoy my friend.

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Sus pulmones se llenaron de frescura cuando aspiró fuertemente, aquella calma y placidez se ungió por todo su cuerpo provocándole una paz y tranquilidad que tenía mucho tiempo sin conseguir. Ladeó el cuello para permitir a esos labios tibios besarle la piel expuesta, luego sintió como unos dedos ávidos se pasearon desde su cintura, por todo su cuerpo hasta postrarse sobre sus hombros.

La fina tela de seda, se deslizó sobre sus hombros pálidos, cayendo la bata al suelo sin cuidado. Su piel se rizó con el toque lánguido de los dedos grandes y gruesos que ahora luchaban por palpar lo mas que le permitiera. Esas mismas manos que degustaban de su piel de suave terciopelo, le obligaron a girar sobre sus pies. En la somnolencia de las caricias y besos sonrió sobre los labios de su amante. Aun le dolían los músculos del trabajo arduo de amarse sin contemplaciones la noche anterior, pero tenía energías, seguiría por quien sabe cuanto mas tiempo.

No le importó estar desnudo a plena luz de la mañana, sobre la proa de aquel yate que se movía al compas de las olas. No le interesaba que su cuerpo tuviera las marcas del amor sin desenfreno y el rastro de posesión irreverente. Estaba ahí ahora por deseo, placer y convicción. No importaba nada mas que ellos dos, entre la bruma marina y el sol abrazador.

Sus labios rosas y gruesos, fueron capturados con ahínco. Disfrutó al igual que él paladear la tibieza del contrario, con los sentidos obnubilados de deseo. Él se separó con delicadeza, hilos de saliva reventándose entre sus labios y la perdida de sabor a miel le obligaron a abrir sus somnolientos ojos esmeraldinos.

-Harreh eres tan hermoso -la forma en que arrastró las letras de su nombre lo éxito en demasía. El hombre se adueñó de su lóbulo mordisqueándolo, soltando palabras sucias e inconexas -

-Oh Zayn-murmuró Harry cuando él apretó sus caderas contra las suyas, sintió su pene desnudo duro y dispuesto contra su pelvis-

-Súbete y muéstrame ese lugar que tanto me gusta-ordenó se sentara en la mesa -

Harry obedeció con el corazón martilleándole en el pecho y la zozobra urgiéndole la respiración. Abrió las piernas mostrando su entrada que cada vez estaba mas ansiosa, boqueó sin lograr concretar una palabra o pensamiento cuándo esos ojos de color miel le observaron con el brillo lujurioso, regalándole al mismo tiempo las mas tiernas caricias.

El castaño recostó la espada en el resto del mueble y se sonrojó sobre manera en el momento que Zayn le abrió mas los glúteos, acercando su rostro y repartiendo lametones en ese punto sensible de su cuerpo.

La lengua estimuló la zona erógena, con habilidad y ternura dándose el tiempo y cuidado de complacerlo. De cuándo en cuando esos orbes miel se asomaban tras sus largas y gruesas pestañas para observar las reacciones de su musa.

-Zayn.. Por favor -suplicó, realmente no sabía que estaba pidiendo. Sus pensamientos embotados de sensaciones no le permitían conectar correctamente las frases-

El moreno se irguió, no sin antes dar un chupete largo y húmedo a la erección de Harry. El chico gimió y llevó sus dedos elegantes y largos a la cabellera azabache. Luego, Zayn dejó un rastro de besos húmedos, erizando la piel a su paso con el aliento cálido.

~Obscura Obsesión~ [Zarry]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora