Capítulo 14: Problemas de integración

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Para cuando llegamos a la aldea el sol ya se estaba poniendo, como de costumbre el guardia me abrió la puerta y al entrar nos encontramos con un escenario extraño por no decir otra cosa, los guardias se lanzaban encima uno del otro mientras que el otro usaba las piernas para sacárselos de encima o tomar la posición dominante en la montura.

-Recuerden usar las piernas y alejen la boca de su oponente de su cuello. -Gritaba Rosa, quien por alguna razón los dirigía.

-¿Rosa? -Pregunté al verla, en ese momento la loba se ruborizó un poco de la sorpresa.

-¡Señor Alfa! Yo... Uhm... le juro que no estaba desatendiendo mis obligaciones con la tienda. -Dijo mientras desviaba la mirada.

-Así que esa es la chica en cuestión. -Dijo el enano que me acompañaba.

-¿Quien es usted? -Respondió con cierto recelo Rosa.

-Soy Guzmán el pescador, hijo de Gastón el constructor, nieto de Guillermo el fabricante de picos y padre de mi pequeña Milli.

-Yo soy Rosa, loba de luna menguante y sirviente directa del Alfa.

-¿Todos los enanos tienen nombres que empiezan con G o solo tu familia?

-Cada aldea enana elige una letra para hombres y otra para mujeres, en nuestro caso son la G y la M, más me sorprende que te dejen servir directamente al alfa no siendo de luna llena.

-¿Eso es malo?

-No para los humanos. -Respondió el enano. La verdad mientras más escucho de esta conversación menos entiendo.

-Como sea ¿Qué estaban haciendo?

-La señorita soldado me pidió que les enseñara el combate de los lobos para que los soldados estén más cómodos cerca de mí.

-¿Está bien que lo enseñes? -Pregunté algo preocupado.

-Está prohibido enseñarlo fuera de la manada, pero el Alfa vive aquí, por lo que si quiero quedarme en este pueblo, tengo que hacer sacrificios para llevarnos bien.

-Rosa... no tienes que... -Pero antes de responder Chuck intervino.

-Sí tiene que hacerlo señor tendero.

-¿Chuck? ¿A qué te refieres? -En ese momento el soldado me miró.

-¿No has notado que tus últimos clientes eran todos extranjeros? La mayoría de las personas no se siente cómoda con lobos cerca, estos tienen una mala fama notable, por eso ideamos un plan para ir convenciendo de a poco a la gente de que son buenos. -No había notado eso ¿Tan poca atención le presto a mis clientes?

-Así que quieres convencer a todos de que ellos son buenos.

-Bueno, fue idea de Carla.

-¿Ella pensó algo tan complejo?

-No, solo dijo "Señor tendero confía en ella y confío en señor tendero, ayudemos a niña lobo". -Lo imaginé.

-Aún así, que ella estuviera dispuesta ayudar... -Pero esta vez fue Rosa quien intervino.

-Para los lobos uno debe sacrificarse por la manada, si eso significa sacrificar mis secretos y cultura lo haré, después de todo, el Alfa arriesgó todo por nosotros. -Mientras lo decía podía ver una mirada extraña en su rostro, en ese momento, uno de sus hermanitos que también estaban en la practica habló con alegría.

-¡Un hombre debe ser varonil y sacrificarse por la manada! -En ese momento el enano a mi lado asintió.

-Te lo dije, las culturas diferentes traen tipos de atractivos diferentes.

-Oh, cierto, casi se me olvida, tenga esto por la ayuda. -En ese momento le entregué un hilo de pesca que había traído, el enano lo miró con curiosidad.

-Que material tan curioso... 

-Sí, bajo el agua se vuelve prácticamente invisible y puede resistir la fuerza de la gran mayoría de peces, por lo que debería serte útil para pescar. -Guzmán entonces sonrió.

-Sin duda es un material invaluable. -Fue entonces que nos percatamos que durante toda la conversación, una de las guardias del pescador había estado todo el tiempo viendo los entrenamientos, por lo que este sonrió.

-Muy bien, como forma de cubrir la diferencia, Melty se unirá para enseñarles también algo de puño enano. -En ese momento la guardia giró rápido la cabeza al oír su nombre.

-¿Yo?

-¿Hay alguna otra Melty aquí?

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