Don't Be Shy (Jori)

Capitulo 12

Tori

—Pienso que estuvo de más ese comentario; odio mucho decir las cosas sin pensar y reflexionarlo cuando ya el daño está hecho.—

—Caminé hacia el café asfalto con ese mismo remordimiento en mi pecho por lo que le dije a Jade; trataba de ignorarlo pero era más fuerte.—

No creo que sea necesario que hagas eso, Cat.—cuando me acerqué a la mesa donde regularmente me sentaba con mis amigos, Beck miraba con cierto miedo a la pelirroja.—

Claro que lo es.— Dijo mientras pasaba un pedazo de tela por dónde seguramente estaba lastimado el.—

¡Auch!— Se quejó cuando sintió el roce del objeto con su herida.—

Heyy...— Saludé tratando de ocultar mi desánimo. Noté que en la mesa estaban Robbie con su marioneta, Stephanie, Cat y Beck.—

Hola Tori, siéntate.— Se apartó un poco la rubia dándome espacio en la mesa para que tomara asiento.—

Muchas gracias.— Agradecí y cuando tomé asiento me dirigí hacia Beck.— ¿Cómo te sientes?— Pregunté con preocupación.—

Ehh podría estar peor; tengo una pequeña herida en el labio y mi nariz ha sacado un poco de... ¡Ouh! ¡Cat! Deja de echarle alcohol a esa tela, me duele.— Se quejó cuando sintió otra vez el contacto de su piel con el alcohol.—

Oh, por suerte no es tan grave.—

¿Y dónde está esa salvaje?— De repente tomó la palabra Rex con sus típicos comentarios de mal gusto.—

— Rodé los ojos y me dirigí hacia el.—

No la llames así.— Dije en tono amenazador.—

Es cierto Rex, no la llames así; creo que a cierto punto tenía sus razones para creer que yo subí esos tweets, aunque tampoco creo que la mejor decisión que tomó fue el golpearme.— Habló de nuevo el moreno sosteniendo su nariz para que la sangre no saliera más.—

Créeme Beck, ella lo siente mucho.— Traté de enmendar las cosas, pero de repente una voz se escuchó; acaparando la atención de los que nos encontrabamos en esa mesa volteamos a ver al instante que se escuchó.—

No hables por mí, Vega.— Allí estaba ella, Jade, como si nuestra discusión nunca hubiese sucedido, con esa característica expresión de disgusto y sus brazos cruzados justo detrás de nosotros.—

Hola Jade, siéntat—

Cállate, no me hables como si fuéramos amigas y deja de hacerte la considerada.— Interrumpió a la rubia antes de que terminara.— Cat, ven conmigo, necesito pedirte algo.—

Oki.— Respondió contenta levantándose de su asiento.—

Espera, ¿Para qué la quieres?— Pregunté con obvia confusión en mi rostro.—

No te interesa.— Respondió tajantemente, algo muy común en ella, dándose la vuelta y alejándose del lugar junto a Cat.—

¿Y aún así dices que no es una salvaje?— Volvió a balbucear Rex; yo ya harta lo tomé y lance muy lejos.—

¡REX!— Exclamó Robbie agitado yendo a traer a su muñeco.—

—Stephanie empezó a reír suavemente.—

Wow, defiendes a capa y espada a Jade.— Me dijo la rubia con una sonrisa cínica.—

Es algo que haría por cualquiera.—

Uhmm no te creo.—

Cree lo que quieras.— Respondí con disgusto; la chica me cae bien, pero a veces puede ser demasiado metiche.—